Una cosecha de garbanzo de Pedrosillo 'madrugadora'

En la comarca de La Armuña, junto a sus afamadas lentejas, la otra legumbre que está protegida es el Garbanzo de Pedrosillo, que cuenta con su propia Marca de Garantía. Este año la cosecha llegará pronto y en apenas una semana comenzará, algo que en principio no era previsible, puesto que las lluvias obligaron a realizar una siembra más tardía.

«El intenso calor del mes de junio ha hecho que este cultivo de secano haya avanzado mucho y esté casi listo para la cosecha», apuntó Nicolás Armenteros, director técnico de 'Legumbres de Calidad'.

En la comarca armuñesa, que es donde se encuentran las tierras cultivadas con estos garbanzos, «la fecha de inicio de la cosecha suelen ser un poquito antes de la festividad de Santiago Apóstol ( 25 de julio), pero este año va a ser un poco más madrugadora», indicó Armenteros.

Otra de las sorpresas de este año ha sido la cantidad de hectáreas que se han sembrado, puesto que tras los precios del pasado año, que bajaron de 80 céntimos el kilo para el productor, a 50 céntimos, se esperaba también que los agricultores no mantuvieran en el interés por los garbanzos, al haber sido también 2024 un año de récord en cuanto a hectáreas sembradas con garbanzo de Pedrosillo.

Así, las cifras indican que en 2022 se sembraron 1.640 hectáreas, una cantidad que en 2023 subió hasta 3.872. En 2024 se estableció el récord con 5.137 hectáreas y este año la cifra ronda las 4.000, con una cifra oficial de 3.929 hectáreas dedicadas a esta legumbre.

«Pensábamos que iban a bajar más las hectáreas, pero sorprendentemente no han bajado tanto», recalcó el experto. Los garbanzos siguen teniendo su público entre los agricultores, que apuestan por tener hectáreas cultivadas con esta legumbre que les permite también diversificar. «Como no se conoce el resultado de las cosechas en otros lugares del mundo no se sabe el precio que podrá tener este año», explicó Armenteros.

Otro factor que hay que tener en cuenta incluye la Guerra en Ucrania y la subida de los insumos que requieren los agricultores para sacar adelante sus cultivos, que han seguido subiendo sin descanso . «Antes tenías una rentabilidad baja, pero ahora el año tiene que se de rentabilidad extraordinaria para que deje beneficios», aseveró el experto.

Con la legumbre todavía en la tierra y cambiando el tono verde de la plata al dorado que indica que se puede cosechar, la primera valoración que realizan los profesionales indican que «la cosecha está muy bien presentada a pesar el calor que está teniendo estos días y la pequeña bajada de temperatura que ha llegado tras el fin de semana. No será una cosecha de récord, ni de altísima producción, pero se puede aproximar a los mil kilos por hectárea como ha ocurrido con la Lenteja de La Armuña, que ya está toda cosechada y la mayoría ha pasado por el asfixie».

Las lentejas de este año están 'casi' listas para comercializarse, pero la recomendación de los expertos es esperar, «al menos hasta septiembre para que esta legumbre pueda dar de verdad la talla de su calidad. Merece la pena esperar porque todo apunta a que este año será muy buena», concluyó Armenteros.

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