Cae en Béjar una banda experta en robar cobre y venderlo en Plasencia

La Guardia Civil ha logrado dar con los integrantes de una banda asentada en Béjar que se dedicaban a robar cobre en diversos puntos de la comarca. Luego lo vendían en Plasencia (Cáceres). Las gestiones han permitido el arresto de tres de los miembros del grupo, aunque la investigación continúa abierta y no se descartan nuevas detenciones.

Según ha podido saber LA GACETA por fuentes del caso, la investigación comenzó en la provincia cacereña después de que una patrulla del Instituto Armado aprehendiera cerca de 300 kilos de cableado de cobre quemado en el término municipal de Oliva de Plasencia (Cáceres).

El material viajaba en un vehículo en cuyo interior iban dos varones, quienes no justificaron debidamente la procedencia del cobre, por lo que los agentes dudaron de ellos y abrieron una investigación. Después de semanas indagando, los guardias pudieron saber que el cableado había sido sustraído de líneas telefónicas ubicadas en Béjar, localidad en la que en el último año se habían producido una serie de robos en cableados de servicio de telecomunicaciones, lo que habría ocasionado un importante perjuicio a los usuarios.

Tirando del hilo, los agentes fueron dando con los puntos de la comarca de Béjar y alrededores donde se habían producido dichas sustracciones, averiguando que tras cometerse muchos de ellos algunos de los miembros de la banda entregaron el cobre en una empresa ubicada en la localidad de Plasencia. En definitiva, los investigadores determinaron que tras estos robos se encontraba una banda perfectamente organizada, a los que se le acusa la comisión de una decena de robos. Los investigados son miembros de la misma familia.

Finalmente fue el miércoles cuando tres de estos implicados, todos ellos varones, fueron detenidos por la Guardia Civil de Béjar como presuntos autores de un delito de pertenencia a grupo criminal y varios delitos de robo con fuerza. Ninguno de ellos quiso prestar declaración y los tres se acogieron a su derecho a no declarar. Tras su paso a disposición judicial, quedaron en libertad provisional a la espera de juicio. Las mismas fuentes apuntan a que la investigación continúa abierta por parte del Instituto Armado para identificar a todos los miembros del grupo, por lo que no se descartan más detenciones en las próximas semanas.

Expertos en la materia indican que aunque con estas acciones los ladrones no consiguen grandes beneficios económicos, pues se necesitan grandes cantidades para ello, los robos causan graves perjuicios a las víctimas, a las que obligan en muchos de los casos a tener que volver a instalar todo el cableado de nuevo.

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