“Los que actúan irresponsablemente es porque no han tenido un caso cerca”
La enfermera Paula Galache teme un nuevo brote por el comportamiento de algunos durante la desescalada
Martes, 12 de mayo 2020, 23:18
Al pie del cañón desde el primer minuto, la enfermera Paula Galache sabe también lo que es vérselas con el virus y el miedo al contagio. Junto al resto de sus compañeros de la planta ocho del Hospital Virgen de la Vega, reconoce que ha vivido y sigue viviendo una experiencia que no olvidará nunca. “Aunque el hospital en el que trabajo en principio está libre de COVID nos hemos encontrado con pacientes contagiados que habían dado primero negativo en la prueba que les habían hecho en Urgencias y luego desarrollaban la enfermedad”, explica.
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Ese temor a contagiarse ellos y sobre todo a poder contagiar a alguno de sus pacientes les llevó a ser precavidos y hacer su propio material de protección. “Fue durante las primeras semanas cuando el material era tan escaso y lo que había lo derivaban a las plantas de enfermos de COVID y a las UVIS. Nosotros decidimos hacernos nuestros propios trajes con bolsas de basura, esparadrapo y grapas, además de mascarillas con paños quirúrgicos”.
Paula reconoce que pesar de tomar “todas las precauciones del mundo” la vuelta a casa sigue siendo un momento complicado. “¿Cómo evitas que un niño de dos años te abrace?, incluso hablé con mi marido sobre la posibilidad de no estar juntos hasta que pasara todo esto... al final te comes mucho la cabeza”, reconoce.
A pesar de lo duro que están siendo estos momentos, asegura que también saca cosas positivas, como la unión con sus compañeros. “Antes a lo mejor cada uno íbamos más a lo nuestro pero ahora nos apoyamos mucho más. También me quedo con los agradecimientos de los familiares de nuestros pacientes, cuando nos dicen que se van tranquilos porque están con nosotros”.
Aunque lo peor parece que ya ha pasado, ni Paula ni sus compañeros bajan la guardia sobre todo después de haber visto el comportamiento de mucha gente durante la desescalada. “Me da miedo y además me pongo negra. Tengo claro que quienes actúan así es porque no han tenido ningún caso cercano y por tanto no saben lo que es”, concluye.
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“Los pacientes de los consultorios deberán adaptarse a la cita previa”
Víctor Manuel González es el coordinador del centro de salud de Villoria, epicentro de una zona básica de salud que se ha visto especialmente azotada por el coronavirus y donde los datos están ya mejorando notablemente.
“Conviene seguir alerta. Durante todo este tiempo muchos de los problemas de salud han estado también “confinados” y ahora tenemos que darles respuesta, al tiempo que seguimos vigilantes a la evolución de la pandemia”, afirma. El facultativo reconoce, además, que “las primeras semanas fueron terribles. Tuvimos que transformar nuestra habitual forma de trabajar, adquirir destrezas, convivir con el riesgo del contagio, situarnos a cierta distancia emocional de muchas situaciones de estrés, nuevas para todos. Todo ello con una carga de trabajo elevadísima. Aunque la situación sea ahora más esperanzadora, González reitera que “debemos mantener los mensajes de prudencia. Al hablar de esa fase de descenso puede parecer que ya no habrá posibilidad de repuntes epidémicos, y eso no es algo que podamos afirmar con rotundidad. Del comportamiento responsable de todos puede depender, en gran medida, la evolución favorable de la pandemia”.
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Para el futuro más inmediato, el coordinador del centro villorejo explica: “Tenemos preparado el Plan de Adaptación a la Normalidad y estamos dando los primeros pasos para su desarrollo. Los pacientes que acudan a los consultorios locales necesitarán adaptarse a la cita previa, que permitirá una atención más ordenada y segura de todos los procesos, ya sean COVID-19 o cualquier otra patología”. A pesar de todo siempre hay algo en positivo y González destaca “sin duda, la respuesta de mis compañeros de equipo, que al igual que el resto de la atención primaria ha sido ejemplar. Han sabido adaptarse a una situación para la que no estábamos preparados, generando sinergias que nos han hecho más fuertes. Todos ellos: personal de limpieza, administrativa, médicos, enfermeras, farmacéuticas comunitarias; todos ellos tienen mi admiración y respeto”.
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