Esta ha sido la línea de bus urbano menos afectada por el descenso de traslados por el COVID

La crisis provocada por la pandemia del coronavirus ha tenido un efecto directo sobre el número de usuarios del bus urbano en Salamanca. Después de registrar el pasado año unos excelentes resultados, recuperando dos millones de viajeros en los últimos cuatro años, con números similares anteriores a la crisis, ahora ha sufrido su récord negativo como consecuencia del estado de alarma y las restricciones posteriores. Así, según los datos aportados por el Ayuntamiento de Salamanca, el bus urbano registró el año recién concluido un total de 6,9 millones de traslados, un 48,7% menos que el ejercicio anterior.

Todas las líneas se han visto afectadas como consecuencia de la situación provocada por el Covid, pero han sido los servicios especiales (Rastro, Ferias, Todos los Santos...) los que han experimentado un mayor descenso, cercano al 75%. Entre las líneas ordinarias, ha sido la 4, Cementerio-Los Toreses, la que ha sufrido una variación más importante, con una caída del 54%, pasando de 1,8 millones de traslados en 2019 a solo 845.576. El trayecto entre el Barrio Blanco y el Montalvo ha sido, por el contrario, el que menos porcentaje de viajeros ha perdido, un 42,9%.

En los próximos días entrará en vigor el nuevo Reglamento del Servicio de Bus Urbano, que incluirá la parada a demanda en el ‘búho’ (ahora sin servicio por el toque de queda).

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