El nuevo presidente del Casino asegura que, tras 17 meses, los socios están “hambrientos de cultura y vida social”

Hace ya 65 años que se hizo socio. En él conoció a su mujer. Y durante los últimos años ha sido estrecho colaborador del ya expresidente Alberto Estella en el reto de seguir impulsando esta institución con más de dos siglos de historia. Desde el pasado domingo, es el nuevo presidente del Casino de Salamanca, y a la mañana siguiente ya estaba en el emblemático edificio de la calle Zamora proyectando los próximos cuatro años. Cuando pasen, se daría por satisfecho con mantener el listón de su predecesor. “Nadie se va a quejar de que no promovamos actos culturales”, asegura.

Tras los duros meses de pandemia, ¿llegará a la presidencia con ganas?

Después de 17 meses, estamos hambrientos de cultura y vida social. Tomé posesión el domingo y ya estoy haciendo gestiones para reiniciar la actividad. La verdad es que tenemos unas instalaciones magníficas. Es muy agradable que el Casino se llene cada tarde de gente que viene a tomarse su cafetito o su cerveza y a jugar a las cartas.

¿Qué retos se fija para una institución con más de 200 años?

El Casino es una asociación de interés cultural que tiene la obligación estatutaria de que sus actos culturales estén abierto a la sociedad de Salamanca. Mi idea es incrementar, más si cabe, la actividad musical, especialmente la música clásica. Durante los últimos años hemos tenido “Los Jueves musicales”, pero me gustaría incrementar más las actuaciones. Quiero reiniciar los recitales de jazz de Salamanca; incrementar las actuaciones de los coros, que son multitud; conferencias de todo tipo; acuerdos con la Universidad y con la asociación de antiguos alumnos de la Universidad; presentaciones de libros,... Todo lo que sea incrementar la cultura.

Han sido muchos meses sin apenas contacto social...

Uno de mis mayores deseos es aumentar la relación social entre los propios socios. ¿Cómo se incrementa? Con una magnífica biblioteca que se mejorará todo lo posible. También reiniciando otra vez las comidas y cenas sociales,... No solo en momentos puntuales como en las Fiestas, sino también celebrando, por ejemplo, una vez al mes una comida o cena de convivencia.

¿Alguna idea para que los jóvenes se sumen al Casino?

Esa es una de las claves del Casino. La edad media de los socios es muy alta, pero, durante la anterior presidencia, con Alberto Estella, se dieron de alta 310 socios nuevos, un hecho histórico. En la nueva junta del Casino cuento con un socio joven. Se va a crear una comisión joven para tratar de atraer no solo a socios nuevos sino a los hijos de quienes ya lo son. A los conciertos viene gente joven, pero no solo quiero que vengan sino que nos den ideas. Nosotros estamos abiertos a toda clase de sugerencias.

¿Qué ve ahora en los socios: ganas de volver o miedo a reunirse?

Afortunadamente se están dando de alta nuevos socios. La mayoría, pese al cierre, han seguido pagando la cuota. Eso lo agradezco enormemente. No hay problema de subsistencia, sino todo lo contrario. Veo muchas posibilidades de que el Casino siga ganando socios y actividades.

¿Cómo intentará atraer actividades de otras instituciones?

Ya he pedido entrevistas al alcalde, el rector de la Universidad, al director de la Fundación Salamanca,... Quiero una estrecha colaboración con todas las instituciones, porque el marco que tenemos para ofrecer todo tipo de actividades es inmejorable.

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