Uno de los municipios salmantinos que está más cerca de la inmunidad

Si hay un pueblo en la provincia que puede presumir de rozar la inmunidad ese podría ser La Tala. La pequeña localidad de la comarca del Alto Tormes cuenta con un alto porcentaje de sus vecinos inmunes al virus, como confirma su alcalde, Gabriel Garrudo, que incluso ironiza con la sensación de seguridad que se respira en este momento en el pueblo.

Por un lado, están los mayores de 70 años que ya han recibido la primera dosis de la vacuna y que en las próximas semanas recibirán la segunda. Se trata de nada menos que la mitad de los habitantes de La Tala, o lo que es lo mismo: 42 de sus 84 vecinos. A este dato, que convierte al pequeño municipio en uno de los más envejecidos de Salamanca, se suma el brote de covid que sufrieron el pasado mes de enero. “Afectó a 22 personas, entre ellos a toda mi familia”, asegura el regidor, mientras recuerda el cribado que tuvo que realizar Sacyl para tratar de frenar los contagios. “Habíamos pasado todo el año sin ningún caso y de repente nos llegaron todos de golpe. Ahora estamos esperando a que los mayores reciban la segunda dosis en Guijuelo”, confirma el regidor.

Una vez superado aquel doloroso capítulo, que confinó a casi todos los vecinos en sus casas, Garrido afirma que La Tala es uno de los pueblos de la provincia donde más adelantado está el proceso de vacunación, precisamente por la avanzada de edad de la mayor parte de su población.

“Aún así no nos relajamos y seguimos insistiendo a los vecinos en que no se olviden de las medidas y continúen con las mascarillas, la distancia de seguridad...”, cuenta.

El cribado masivo que en su día se realizó en esta pequeña localidad a poco más de 15 kilómetros de Guijuelo coincidió con el que Sanidad llevó a cabo en el cercano municipio de Cespedosa de Tormes, donde las Navidades dejaron una treintena de contagiados entre los vecinos.

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