La enésima inundación de este paso inferior convertido en un ‘tunel acuático’

Las últimas tormentas que están descargando en Peñaranda están causando, una vez más, problemas en el paso inferior de las vías del ferrocarril en el Paseo del Inestal, convertido ahora en un auténtico túnel acuático.

Vecinos de la urbanización Los Chopos y trabajadores de las empresas ubicadas en el polígono industrial El Inestal, que utilizan a diario este paso para comunicarse con el casco urbano de la localidad peñarandina, son los principales afectados por una situación que suele repetirse con frecuencia y para la que reclaman una solución definitiva.

Todo parece indicar que los sistemas para achicar el agua en caso de intensas precipitaciones, como las que descargan con las tormentas de estos días, no funcionan como deberían o resultan insuficientes para evitar el encharcamiento del paso.

“El viernes por la tarde, tras la última tormenta, era aún peor y había varios dedos de agua en el túnel. Si no quieres mojarte los pies hasta los tobillos la solución es cruzar las vías en la estación pero hay personas que pasan con carritos de bebé o en silla de ruedas que ni siquiera tienen esa posibilidad”, dijeron algunos de los afectados.

A todos ellos se suman, además, las numerosas personas que aprovechan ahora sus ratos de ocio o paseos diarios para ir hasta el parque del Inestal y que también tienen que atravesar obligatoriamente por esta zona en caso de ir caminando.

“Habrá que sacar otra vez las botas de aguas y tenerlas a mano para cruzar el túnel, visto lo visto”, comentaban también varias de las personas que se aventuraban a ir de un lado a otro, bien al casco urbano o al polígono industrial y Los Chopos.

Desde hace años se repiten, además, las acciones vandálicas en el paso inferior donde suelen aparecer los focos de iluminación rotos y existen múltiples pintadas sobre el hormigón. “En pleno invierno, cuando a las siete de la tarde ya es de noche, la verdad es que da miedo pasar por aquí cuando la gente sale de trabajar de las fábricas del polígono o cuando vuelven a casa en Los Chopos”, añaden.

Con la mirada puesta en el cielo por si vuelve a descargar otra tormenta y complica aún más la situación viven ahora los que obligatoriamente se enfrentan a diario a este trayecto pasado por agua.

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