Las renovadas escaleras de la Plaza Mayor, a falta de remates
La finalización del suelo direccional en El Ochavo y la instalación de barandillas rematarán la reforma que ha mejorado la accesibilidad
Las escaleras de la Plaza Mayor están a punto de concluir su reforma, tareas que han afectado a las tres estructuras en mayor o menor medida.
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La escalera de Pinto ya es transitable a la espera de remates, en concreto de que se coloquen los pasamanos que se instalarán en ambos lados. El pasado día 5 de mayo comenzaron los trabajos que, en este caso, han supuesto la retirada de los antiguos peldaños.
Tanto en Pinto como en las otras dos escaleras se han instalado baldosas direccionales de granito negro para invidentes a ambos extremos.
También conocidas como pavimentos podotáctiles, son baldosas con relieve que sirven como señalización para guiar a personas con discapacidad visual.
Son reconocidas por las personas con discapacidad visual al tacto, facilitando su orientación y moviendo.
En San Fernando ya están instaladas, mientras que este viernes los operarios remataban este viernes su colocación en las escaleras del Ochavo.
Las tareas para mejorar el agarre del calzado en las escaleras, así como para colocar baldosas direccionados y la próxima colocación de pasamanos dobles se presupuestó en 149.500 euros.
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