La procesión del Cristo Yacente 'sortea' la lluvia

Tal y como estaba previsto, a pesar de las precipitaciones que cayeron en la capital durante gran parte de la tarde y que obligaron a suspender la procesión de Jesús Flagelado, el Cristo Yacente de la Misericordia y de la Agonía Redentora pudo recorrer las calles de Salamanca.

El acto comenzó veinte minutos antes de la medianoche con un recuerdo a la Pasión de Jesucristo y la promesa del silencio que el capellán pide a los cofrades y el alcalde a los salmantinos. Además, Carlos García Carbayo pidió por aquellos que, en la actualidad, están sufriendo los horrores de la guerra ante la presencia del obispo de Salamanca, José Luis Retana.

Minutos antes de la medianoche, la poeta Mónica Velasco recitó unos versos, tras un 'impass' de media hora en el que no se sabía si se celebraría el acto, finalmente, la lluvia cesó y a los 00:30 de la noche, media hora después de lo previsto, se pudo celebrar el tradicional acto de fe, aunque con un recorrido más corto del planificado. Los pasos recorrieron la Rúa Antigua y Libreros y volvieron a la Catedral una hora y media antes de lo habitual, finalizando la procesión a las 2:25.