Pétalos de rosa y alfombra de tomillo para el Santísimo y los niños en Calvarrasa de Abajo

La celebración del día grande de las citas religiosas en la localidad de Calvarrasa de Abajo cumplió con todas las tradiciones que se conservan vivas en la localidad.

Así, la eucaristía arrancó a la una del mediodía para dar paso después al tradicional desfile religioso por las calles del municipio. Esta procesión cada año realiza el recorrido de menos de cien metros entre el portal de la parroquia y la Casa Consistorial, donde se monta en sus escaleras un precioso altar.

Los pasos de las escaleras se taparon en esta ocasión con telas blancas, en tanto que los laterales se decoraron con varios ramos y centros de flores. Sobre este punto, en el balcón de la casa Consistorial colgaban en esta ocasión distintos mantones de Manila cuajados de bordados de flores coloridas.

La llegada del Santísimo bajo palio hasta este punto fue el momento más señalado de la procesión y permitió ver de cerca la veneración en el altar.

Tras el solemne instante, que se vivió bajo una lluvia de pétalos de rosa y con los participantes en el desfile religioso caminando sobre una alfombra de tomillo, llegó el momento más emotivo, con la tradicional presentación de los niños más pequeños ante el Santísimo.

Sobre la alfombra de pétalos de rosa este año el bebé más joven fue Martín Hernández, con poco más de dos meses de vida. Compartieron la celebración otros pequeños como fueron Gala Sánchez, Aitor Mauro, Carmen Vaquero, Triana Martín y Zoe Gallego, que lucieron sus mejores galas para la ocasión en la que tradición y fiesta se entrelazaron.

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