Las 120 historias de los descendientes de Segunda y Pedro
Una familia de Cantaracillo ha conseguido crear un árbol genealógico de cinco generaciones con 215 miembros de los cuales tan sólo han muerto 19
Este sábado se vivieron momentos muy emocionantes en Cantaracillo gracias al fruto de un trabajo que ha llevado muchas horas de estudio e investigación a Generoso Fuentes, su hija, Beatriz Fuentes; y sus sobrinas, Lourdes Pérez y Selene Pérez.
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En un arduo trabajo en equipo han logrado recopilar las 215 fotos de todos y cada uno de los miembros de las cinco generaciones de una familia de Cantaracillo.
Corría el año 1902 cuando nació Pedro Pérez, cuatro años más tarde, en 1906, vino al mundo Segunda Bernal. Ambos se conocieron y contrajeron matrimonio. Tuvieron doce hijos, 44 nietos, 65 bisnietos y 22 tataranietos hasta el momento.
Este sábado se encontraron 120 de ellos en Cantaracillo. Fue una jornada repleta de sentimientos y emociones. El encuentro fue destacado ya que muchos no se conocían, otros hacía años que no se veían. Abrazos, besos y muchas palabras cargadas de intensidad dejarán huella en cada uno de los participantes en esta cita.
A primera hora visitaron la iglesia parroquial de Cantaracillo. Un templo que a buen seguro acogió muchos momentos memorables de esta familia. Posteriormente acudieron al cementerio a hacer una ofrenda floral a los abuelos. Después visitaron la casa de Pedro y Segunda donde se criaron sus 12 hijos.
Más tarde se reunieron en un restaurante de Peñaranda de Bracamonte para conocer el gran árbol genealógico impreso en una lona de 2,20 metros. Después de poder contemplar el gran árbol genealógico de esta familia con origen en Cantaracillo comieron, bailaron y disfrutaron durante todo el sábado.
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Muchos de los 215 miembros son de Cantaracillo, pero la familia ya se ha expandido por el mundo. Ayer se encontraron personas llegadas de toda España. «De Madrid, Vitoria, Bilbao, La Coruña, hasta de Seúl (Corea del Sur)», cuenta Generoso Fuentes Pérez.
Entre las peculiaridades de este árbol genealógico se encuentran los dos miembros de mayor y menor edad. El más veterano es Santos Pérez, de 92 años y el más joven es Llum Barbero de dos meses. «Sólo han muerto 19 personas en las cinco generaciones, o sea que somos una familia fuerte y duradera», es otra de las peculiaridades que cuenta Generoso Fuentes.
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También han tenido una mención especial a Segunda Bernal, una mujer fuerte que vivió nueve décadas y dio a luz a doce hijos.
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