Álvaro Muñoz Escassi, en 'Supervivientes'. E. P.

Álvaro Muñoz Escassi se rinde a Lara Dibildos en 'Supervivientes': «No la puedo querer más. Ojalá siempre esté conmigo»

El jinete confiesa en directo su admiración y cariño por la madre de su hijo con una emotiva declaración que deja a Lara sin palabras

E. P.

Madrid

Viernes, 13 de junio 2025, 10:24

La relación entre Lara Dibildos y Álvaro Muñoz Escassi siempre ha sido ejemplar. Aunque su historia de amor terminó en 2007 tras una infidelidad por parte del jinete, la expareja ha mantenido una estrecha amistad basada en el respeto, el cariño y su hijo en común, Álvaro, que ya tiene 18 años. A lo largo de los años, Lara se ha convertido en una de las principales defensoras de Escassi, incluso en sus momentos más controvertidos.

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Ese vínculo inquebrantable volvió a brillar este domingo en 'Supervivientes: Conexión Honduras', cuando Lara y su hijo sorprendieron a Escassi con una videollamada llena de emoción. Entre lágrimas, ella expresó lo orgullosa que está de él, de su evolución en el concurso y de la madurez que ha demostrado. El jinete, visiblemente conmovido, respondió destacando la importancia de Lara en su vida.

Pero el momento más emotivo llegó este jueves, durante la gala presentada por Jorge Javier Vázquez. Minutos antes de convertirse en finalista gracias al apoyo del público, Escassi se sinceró como nunca al ser preguntado por lo que creía que Lara estaría pensando al verlo desde el plató.

«Lara siempre piensa bien de todo el mundo», comenzó diciendo, antes de deshacerse en halagos: «Es uno de los pilares de mi vida. Siempre ha estado ahí, como amiga, como madre de mi hijo, como apoyo constante... Es honesta, buena, simpática, cariñosa, amable… Es todo».

A punto de emocionarse, lanzó una declaración que dejó sin palabras tanto a Lara como al público: «Es como tener una ventaja sobre el resto del mundo por tener una Lara en tu vida. Hay que poner una Lara en la vida de cada uno para encontrar la felicidad».

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Cuando el presentador bromeó con la posibilidad de que ella no estuviera viendo el momento, Escassi no dudó: «Si no me está viendo, la mato. Le diría lo que ya sabe: que no la puedo querer más, que no puedo necesitarla más en mi vida y que ojalá siempre esté conmigo».

Una confesión sincera y emotiva que ha reafirmado la admiración mutua entre dos personas que, aunque tomaron caminos separados, siguen siendo familia en el sentido más profundo de la palabra.

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