Un sanitario administra un test rápido en Salamanca. ALMEIDA

Así funcionan los test del coronavirus: la explicación de los expertos del Hospital de Salamanca

Las pruebas PCR y las de anticuerpos son las herramientas empleadas para detectar el COVID-19. De utilizar cada una en el momento adecuado y saber combinarlas depende el éxito frente a la pandemia

Miércoles, 29 de abril 2020, 19:05

¿Funcionan o no funcionan los test que detectan el coronavirus? ¿Nos han engañado los chinos? ¿Qué es eso de los anticuerpos?

Publicidad

Los test de detección del COVID se han convertido en uno de los temas más recurrentes, pero que más dudas generan en la población. En España se están utilizando, básicamente, cuatro tipos de test y en numerosas ocasiones no basta con uno solo para obtener un diagnóstico claro, sino que hay combinar dos de ellos.

El que más se ha empleado es la prueba de detección molecular o PCR, que se caracteriza por ser el único que busca directamente al virus, y no a las pistas que deja el COVID. El jefe del servicio de Microbiología del Hospital, Juan Luis Muñoz Bellido, explica que “a diferencia de las células humanas, que tienen ADN y ARN, el virus solo tiene ARN. Con este test se localiza un fragmento del genoma del COVID y se empieza a duplicar y duplicar hasta que logras millones de copias. A partir de ahí lo detectas”.

Bellido puntualiza la diferencia entre dos conceptos: “La sensibilidad de un test es la capacidad que tiene para detectar un virus, si es que lo hay; mientras que la especificidad es la capacidad para no equivocarse con otros virus”. Ambos factores juntos permiten hablar de fiabilidad: ¿cómo de fiable es un test. En el caso del PCR tiene una sensibilidad superior al 95%... si se hace en el momento adecuado. “Depende de que el virus esté en ese momento en la nasofaringe, donde permanece un tiempo relativamente corto”. Durante, aproximadamente, una semana desde el inicio de los síntomas, el virus se puede localizar introduciendo un bastoncillo por la nariz y llegando hasta el fondo. Pero al cabo de un tiempo el virus se desplaza y desaparece de ahí. La PCR es el test más indicado cuando se llevan pocos días con síntomas, pero al menos hay síntomas. De lo contrario, existe un alto riesgo de falso negativo.

El otro bloque de test diagnósticos son los de anticuerpos, que pueden ser ‘anticuerpos totales’ o ‘anticuerpos IgG / IgM’. Los primeros son los que compró el Gobierno a China. Recibió una primera remesa que, directamente, estaban defectuosos y hubo que devolver. Los siguientes envíos no estaban defectuosos, pero siguieron recibiendo críticas porque hay que esperar tiempo para que sean realmente sensibles –a partir de 8 o 9 días desde que empezaron los síntomas- y, aún así, no te sacan de dudas: ¿Estoy enfermo o ya lo he pasado?

Publicidad

Por el contrario, los modelos que se están empleando ahora sí detectan y distinguen dos tipos de inmunoglobinas. Los anticuerpos IgM son las defensas que el enfermo genera al inicio de la infección sin saber muy bien contra quién se está enfrentando. Al cabo de unos días ya tiene claro a qué virus se enfrenta y fabrica otros anticuerpos –los IgG- específicos para ese virus. “Estos anticuerpos son los que luego perduran durante meses o años, aún no se sabe, y te protegen para que no te vuelvas a contagiar, porque el cuerpo ya tiene memoria y los fabrica más rápido”, explica el doctor Muñoz Bellido.

Si el test detecta solo IgG significa que la infección está finalizando y ha creado inmunidad. Si detecta solo IgM significa que estás en plena enfermedad y no has empezado a curarte. Si detecta ambos significa que sigues contagiado, pero ya en fase de curación.

Publicidad

Estos dos test de anticuerpos se realizan mediante un envase de plástico como el de los test de embarazo, pero también se puede hacer en laboratorio. Es el llamado método ELISA. “Esta técnica es mucho más sofisticada y se emplea para la detección de hepatitis o del VIH, por ejemplo”, explica el jefe de Microbiología. Su sensibilidad es superior al 90% y analiza una muestra de sangre tomada en vena. “Utiliza un sistema de lectura por quimioluminiscencia. Por cada unidad de anticuerpos que detecta emite una cantidad de luz, y en función de la cantidad global deduces cuántos anticuerpos hay”, aclara.

La posibilidad de cuantificar los anticuerpos tiene un gran valor epidemiológico porque permite intuir quién está en riesgo de volver a contagiarse y quién no. “Se estudia si quienes han pasado la enfermedad con síntomas leves han generado menos anticuerpos, y si los que superaron cuadros más graves han generado mayor cantidad de anticuerpos”, añade el profesor de la Universidad.

Publicidad

Todavía habría un quinto modelo que es el test de antígenos. De momento no está en el mercado y lo que hace este modelo es “buscar las proteínas que hay en el envoltorio del virus”. Tiene el inconveniente de que necesita una alta cantidad de proteínas circulantes para alcanzar una sensibilidad cercana al 70%.

La última gran pregunta que se formula la gente es qué sucede si no hay síntomas. ¿No se puede realizar un test? Sí que se puede. De hecho se están haciendo ya de forma sistemática test de anticuerpos en sanitarios, policías o ancianos de residencias, sobre todo para encontrar a personas que, sin saberlo, habían pasado la enfermedad, aunque también pueden hallarse contagios activos.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Disfruta de acceso ilimitado y ventajas exclusivas

Publicidad