Instalación de una jaula trampa donde se meten palomas de reclamo con comida en el municipio de Peñaranda. TRISOL

La iniciativa de este municipio para ‘cazar’ palomas y acabar con la plaga

Carbajosa colocará jaulas trampa en seis ubicaciones donde existe una mayor concentración de este tipo de aves

Martes, 3 de noviembre 2020, 11:59

La plaga de palomas que últimamente está asolando el municipio de Carbajosa ha obligado al Ayuntamiento a tomar cartas en el asunto con el fin de acabar de una vez por todas con esta fuente de insalubridad. Así, los responsables municipales instalarán al menos seis jaulas trampa en los lugares donde mayor número de aves se concentra.

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Para llevar a cabo esta medida el Consistorio ha contratado a una empresa especializada en el control de plagas y la salud ambiental que comenzará a trabajar en los próximos días, aunque el equipo de Gobierno ya ha dado el primer paso con la localización de los lugares más afectados por la presencia de las aves.

“El objetivo es el control poblacional y la captura de palomas en el municipio con el fin de reducir el número de aves asentadas en Carbajosa hasta llegar a unos mínimos aceptables”, explicó la concejala de Sanidad, Noemí Fernández.

La retirada de palomas se realizará a una granja autorizada que cuenta con todos los permisos necesarios y lo realizará personal cualificado que también será el encargado de hacer al menos una visita semanal a las jaulas. El contrato suscrito entre el Consistorio y la empresa tiene una duración inicial de un año, tiempo en el que se espera haber solventado el problema.

Las palomas ya suponen en muchos municipios de la provincia un problema recurrente que ha obligado a los ayuntamientos a tomar medidas, como en Alba de Tormes, donde al menos llevan ocho años sufriendo las consecuencias de esta plaga. En Peñaranda hace ya cuatro que se instalaron jaulas trampa, con lo que se consiguió reducir en parte el problema ya que continúan campando a sus anchas por el pueblo aunque en menor medida. Los vecinos de Los Cisnes en Terradillos también tuvieron este problema hace dos años y en El Encinar las palomas muertas tuvieron que ser “desalojadas” de un piso vacío.

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