Campillo honra a su patrona con una emotiva misa adaptada a los tiempos del Covid
La localidad celebró una misa en honor a la Virgen del Carmen con homenaje a los fallecidos por Covid. Después, repartió más de 300 raciones de arroz casa por casa

Campillo de Salvatierra celebró ayer las únicas actividades festivas en honor a la Virgen del Carmen que pudo realizar dentro de la actual situación sanitaria suscitada por el coronavirus.
Unas actividades que comenzaron con una emotiva misa en la iglesia parroquial, que llenó su aforo dentro de las limitaciones establecidas. El acto contó con la presencia de la Junta vecinal de Campillo encabezada por su alcalde, Juan Carlos Tejedor, a quienes acompañaron la primera teniente de alcalde de Guijuelo, Yolanda Alonso; el edil de Guijuelo por Cs Ángel Sánchez o el jefe de la policía Local, Clemente Iglesias, entre otros. Estuvieron también presentes familiares de Luisa y Antonio, los dos fallecidos en la localidad por culpa del coronavirus.
Los responsables de la Junta Vecinal hicieron entrega de un ramo de flores como homenaje a ambos mientras se escuchaba “La muerte no es el final”, un emotivo momento que marcaba el cierre de la celebración religiosa. Esos actos tuvieron lugar en el interior de la iglesia parroquial, cuyo acceso estuvo regulado por dos voluntarios de Protección Civil de Guijuelo con el objetivo de velar por el cumplimiento de las normas establecidas y controlar el aforo máximo permitido dentro del templo.
La atención se desplazaba después al entorno del Salón, donde se preparaba la comida para más de 310 personas a base de paella y carrilleras. Un menú que se completaba con sobres de chorizo, salchichón y jamón, además de lengua embuchada como obsequio de la junta. No faltó el pan, los flanes como postre y una botella de vino. Eso sí, el reparto se hizo casa por casa y no fue necesario que los vecinos se acercaran a recoger sus raciones. Acababan así unas fiestas del Carmen muy atípicas con la idea de que no se repitan porque se haya garantizado la salud de todos los vecinos de la localidad.

En condiciones normales, la fiesta hubiera acabado ayer, domingo, como es costumbre. Tiempo habrá, confían en la localidad, de recuperar las multitudinarias celebraciones de años atrás en las que Campillo se convierte en un referente provincial con conciertos gratuitos y verbenas de primer orden.