Secciones
Destacamos
Viernes, 5 de agosto 2022, 14:58
Necesitas ser registrado para acceder a esta funcionalidad.
Opciones para compartir
El verano y sus altas temperaturas hacen que en muchas ocasiones necesitemos del hielo para refrescar un poco el ambiente. Normalmente usamos el agua congelada para enfriar las bebidas, pero también puede ser necesario, por ejemplo, para conservar algunos alimentos.
El problema del hielo es que se derrite, claro está, algo que no nos viene nada bien si queremos que siga cumpliendo de la mejor manera la función para la que lo queremos. Por eso, en este artículo te dejamos unos trucos que posibilitarán que este se conserve intacto durante más tiempo y no pierda su forma sólida rápidamente. Algo que en estos momentos es más relevante si cabe por la escasez de este producto que existe en algunos comercios.
Si forramos el interior del recipiente que vayamos a usar para enfriar nuestros productos, conseguiremos que el calor no penetre y el hielo aguante más tiempo sin derretirse.
La sal gruesa es un gran complemento si queremos mantener nuestras bebidas frías. En un recipiente, echamos el hielo, agua, sal y... listo. Cuanta más sal, antes se enfriará nuestra botella o lata, ya que al disolverse en el agua, la sal absorbe energía y se crea una reacción endotérmica, lo que favorece a que la temperatura se conduzca más rápidamente.
El papel mojado sigue el mismo proceso que el papel de aluminio. Con papel o un trapo empapado cubriremos el interior del recipiente que utilizaremos para enfriar, lo que hará que la temperatura exterior no acceda al interior de nuestra nevera, botella...
Hacer los bloques de hielo con agua caliente, aunque parezca mentira, hará que estos se mantengan más tiempos sólidos. Herviremos el agua previamente, para después seguir el proceso normal de hacer hielos. Al disminuir las burbujas con este proceso, el agua se congela más rápido y de manera más compacta.
Cuanto más grande sea el hielo, más aguantará sin derretirse. Necesitaremos cubiteras (o cualquier otro medio con el que hagamos el hielo) de tamaño más grande que el estándar para conseguir esto. La temperatura de los hielos se mantendrá durante más tiempo, con lo que podremos disfrutar más rato de las bebidas frías.
Cualquier mínima cosa que nos ayude en nuestra misión de conservación del hielo será bienvenida, y este truco es una muestra clara. Elegir una nevera con colores claros hará que se mantenga durante más tiempo el frío ya que atraerán menos el calor.
Como ya se ha comentado con el papel de aluminio y el papel mojado, en esta ocasión usaremos una toalla mojada para envolver la nevera con los hielos bien por fuera o por dentro. Impedirá durante un tiempo que el calor entre a la nevera.
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.