La ganadería salmantina en el podio de las divisas con más puertas grandes en Madrid

El último en conseguirlo con un astado charro fue Emilio de Justo el pasado 11 de mayo, cuando desorejó a Valentón, marcado a fuego con el hierro de Garcigrande (Justo Hernández) en la segunda entrega de la feria de San Isidro en curso. El Campo Charro concluyó su paso por San Isidro el pasado sábado, con la lidia de la corrida de toros de El Pilar (Moisés Fraile).

Con el último triunfo, la divisa de Garcigrande se dispara hasta los puestos altos del escalafón que recoge a los hierros con más puertas grandes en la primera plaza del mundo en lo que va de siglo. Una tabla que encabeza la ganadería de Victoriano del Río —que falló en la primera entrega de la presente isidrada y que repetirá en este mismo escenario el próximo 11 de junio (El Juli, Alejandro Talavante y Roca Rey)— con trece puertas grandes en su haber. A ellas les suma dos más (15) en tardes en las que se cortó una oreja a uno de sus toros junto a otro trofeo de un astado de otra marca. La primera la consiguió César Jiménez en 2006 y las dos últimas —en la misma tarde además— el pasado 12 de octubre, cuando compartieron salida a hombros Roca Rey y Francisco de Manuel en la tarde que cerró la campaña en el coso venteño el Día de la Hispanidad. A esas trece coronas de Victoriano del Río le sigue, Alcurrucén con nueve; y a partir de ahí entran ya en acción las bazas salmantinas que lanzan su ofensiva a los primeros puestos. Las tres puertas grandes de Garcigrande, de manera consecutiva en las tres últimas temporadas desde la reanudación de los festejos tras la parada de la pandemia (en San Isidro de 2022 Tomás Rufo y Emilio de Justo en este que se suma a la de la feria de Otoño de 2021), hacen que supere ya la marca de Puerto de San Lorenzo que, hasta la irrupción del coronavirus y posterior parón, marcaba la gran referencia de las divisas del Campo Charro en las tardes triunfales de la primera plaza del mundo.

De esta manera, los toros de Justo Hernández se sitúan ya con ocho puertas grandes por las seis que tiene la divisa de Lorenzo Fraile.En el caso de Garcigrande suma además otra más (7) por la oreja que cortó Antonio Ferrera en su encerrona de 2019 (más otra de uno de Victoriano del Río); mientras que Puerto de San Lorenzo completa su historia triunfal en esta plaza con cuatro más (10) en las que, tras cortar una oreja a sus toros, colaboró a que se abriera esta tarde la puerta grande del coso de la calle Alcalá.

A Garcigrande y Puerto de San Lorenzo se suman además tres ganaderías salmantinas que propiciaron salidas a hombros en Madrid en lo que va de siglo:Sebastián Castella se convirtió en el primer matador de toros francés en abrir la puerta grande de Las Ventas tras cortarle las dos orejas a un toro de Valdefresno en el San Isidro de 2007, mientras que David Mora cortó una oreja a cada uno de sus animales de esta misma ganadería en la feria de 2012. Le siguen José Cruz (Conchi Ríos a un utrero en el verano de 2011) y Javier Pérez Tabernero, ganadería a la que pertenecía el toro al que Enrique Ponce le cortó las dos orejas en la feria de San Isidro de 2002.

Las 106 veces que se ha abierto la puerta grande en Las Ventas en lo que va de siglo la han propiciado cuarenta y dos ganaderías diferentes, entre ellas las cinco del Campo Charro. Y, de todas ellas, catorce lo han logrado en más de una ocasión. En cuanto a los triunfos de las últimas temporadas pospandemia se refiere, llama la atención las tres puertas grandes conseguidas de manera consecutiva de la ganadería de Garcigrande, en sus últimas tres comparecencias de 2021 a 2023; de la misma manera que destacan las tres puertas grandes conseguidas por Victoriano del Río el año pasado, la de Ángel Téllez en San Isidro y el doblete (Roca Rey y Francisco de Manuel) el 12 de octubre. Alcurrucén, que ocupa el segundo lugar en esta particular clasificación de triunfos, proporcionó la última el 12 de octubre de 2021 cuando Ginés Marín desorejó a Secretario, el sexto de aquel cierre de campaña.