Borrar
Del Álamo, López Chaves y Diosleguarde, en el patio de cuadrillas. J.L.
Diosleguarde, una espada contundente en Peñaranda

Diosleguarde, una espada contundente en Peñaranda

El novillero corta tres orejas gracias a una fantástica espada; en tarde de pinchazos de Chaves y Del Álamo que emborronaron dos trasteos de nivel

Sábado, 24 de agosto 2019, 22:57

Necesitas ser registrado para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Dos otros armónicos y de muy diferente condición marcaron la primera parte del festejo en La Florida. López Chaves se lo puso a placer para embestir a Gaitero pero apenas empleó su nobleza para viajar siempre con recelo, sin ganas y a regañadientes en una faena medida y entregada en la que puso más el torero que el desfondado toro, y ante esa negativa el ledesmino terminó metido entre los pitones. Se atascó con la espada. Un cadencioso y mimado inicio y tres tandas le duró Habanero, el cuarto, a López Chaves, en las que acarició el toreo, a placer y a cámara lenta, en pasajes de enorme belleza. Las otras cuatro tandas de la segunda parte de la faena se las robó el ledesmino con buena dosis de valor, aguantando las miradas y las cada vez más agotadas embestidas, y también gracias a un exquisito temple. Faena medida, exquisita, templada, original, distinguida y de un poso sabrosísimo que otra vez empañó con los aceros. El poso del trasteo caló y pese al fallo a espadas le concedieron un trofeo que guardó y no paseó.

Jaleoso, el segundo, que embistió con incertidumbre de salida, despertó en la fantástica brega de Jarocho, medida, poderosa y sedosa. Del Álamo le firmó un poderoso y torero inicio por bajo y ahí ratificó su magnífica condición el pupilo de Sánchez Arjona, que embistió largo, humillado, pronto y con vibrante alegría. El mirobrigense lo atemperó a derechas y lo cuajó a placer en una extraordinaria tanda al natural que no logró mayor continuidad. A pesar de que mató de mala manera, el público pidió la oreja y el palco atendió la petición para estrenar el casillero de trofeos. Espléndido el saludo capotero quinto, así como el quite a la verónica tras el puyazo de Curro Sánchez. Faena de asiento, desparpajo, euforia contenida, arrebato asentado y buena estructura, desde la apertura de hinojos en los medios hasta el cierre. En medio, un trasteo basado en la mano derecha en el que acarició y gozó las buenas embestidas de Barbadura, que mantuvo el tono y el tino de unas embestidas para gozar que Del Álamo saboreó y administró con tacto y temple. Hasta que lo tiró todo por la borda con los aceros de mala manera.

No hubo mucha diferencia entre el primer novillo y los toros precedentes. Utrero con cuajo y hechuras de toro. Con muleta firme, mano baja y trazo limpio trató Manuel Diosleguarde de limar la tarascada que pegaba en cada embestida el astado de La Ventana que, antes de comenzar la faena, ya mostró su huidiza condición. Lo retuvo Diosleguarde con muleta poderosa y se atemperó por completo en la primera de las dos volteretas que se pegó el novillo por la humilladas embestidas y también por codicia de cada acometida. A partir de ahí, el torete ya manseó sin disimulo. Lo mató con decisión y amarró el trofeo. El sexto tuvo nobleza pero le faltó ritmo y se fue violentando a medida que transcurría el trasteo. Trató Diosleguarde de limar aquella aspereza de cada embestida, sin embargo, la faena se topó con la frialdad de un público que siguió con demasiado sigilo todas las faenas. En este recetó una soberbia estocada, con una soberbia ejecución y un fenomenal efecto. Fue la nota feliz en una tarde que tuvo un desafortunado recital de pinchazos. Diosleguarde fue la excepción.

LA FICHA

Plaza de toros de La Florida. Más de media entrada en tarde soleada y de mucho calor.

4 TOROS DE SANCHEZ ARJONA Y 2 NOVILLOS, DE LA VENTANA DEL PUERTO (3º) y PUERTO DE SAN LORENZO (6º). Noble pero apagado y descastado el 1º; bravo de gran juego el 2º; manso encastado el 3º; noble y con calidad el 4º que tuvo escaso fondo; noble y con calidad el 5º; y noble pero informal el 6º.

LÓPEZ CHAVES (verde hoja y oro)

Dos pinchazos y estocada (ovación con saludos); y dos pinchazos y estocada (oreja).

JUAN DEL ÁLAMO (blanco y plata)

Media defectuosa, trasera, baja y atravesada (oreja tras aviso); cinco pinchazos, estocada casi entera y tres descabellos (silencio tras aviso).

MANUEL DIOSLEGUARDE (grana y oro)

Estocada desprendida (oreja tras aviso); y extraordinaria estocada (dos orejas).

Cuadrillas: fantástica brega de Jarocho al 2º; dos extraordinarios pares de Elias Martín al 3º.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios