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Plaza de Burgos, donde sucedieron los hechos. ARCHIVO
Un salmantino, al banquillo por darle una patada a su novia tras discutir en una boda

Un salmantino, al banquillo por darle una patada a su novia tras discutir en una boda

La pareja se enfadó en la fiesta y durmieron por separado, pero al día siguiente quedaron para darse unas llaves en la plaza de Burgos y el hombre presuntamente la agredió

Lunes, 18 de febrero 2019, 14:36

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Un hombre tendrá que sentarse este martes en el banquillo de los acusados como presunto autor de un delito de lesiones en el ámbito de la violencia sobre la mujer después de que presuntamente el verano pasado diera una patada a su novia tras haber discutido con ella un día antes en la celebración de una boda.

Los hechos, según se recoge en el escrito del Ministerio Fiscal, ocurrieron el 15 de julio de 2018 a las 07.30 horas en la vía pública, donde el acusado, de iniciales E.P.C. y sin antecedentes penales, había quedado con la que entonces era su novia para la entrega de unas llaves. En un momento de la conversación, el fiscal asegura que el hombre propinó una patada a la víctima que le causó un hematoma en el glúteo derecho, una lesión por la que le pide una pena de 6 meses de prisión y la prohibición de acercarse a menos de 250 metros a la mujer por un año y medio, además de comunicarse con ella.

La acusación particular va más allá y solicita para el varón un año de prisión por un delito de lesiones y una multa de 720 euros por otro añadido de injurias. Y es que según su escrito de acusación ya un día antes en la barra libre, que tuvo lugar en un local de la plaza de Monterrey, el acusado se dirigió hacia su pareja y la agarró “violentamente” del brazo para recriminarla que no hubieran acudido juntos hasta el pub, una actitud por la que el acusado acabó expulsado del establecimiento.

Luego, según se recoge en el mencionado documento del letrado de la víctima, el acusado volvió a entrar y le pegó un puñetazo a la que era su pareja en el brazo, lo que hizo que la joven se fuera para casa en compañía de una amiga. A la mañana siguiente fue cuando ambos quedaron en la plaza de Burgos para la entrega de las llaves de la vivienda y el hombre comenzó a increpar a la víctima, le propinó supuestamente la patada y la persiguió hasta que la mujer pudo refugiarse en casa de una amiga. Pero según la víctima la historia no acabó ahí y en los días posteriores recibió a través de la aplicación WhatsApp diversos insultos por parte de E.P.C.

Por el contrario, la defensa del acusado pide para su defendido la libre absolución al considerar que en ningún momento este agredió a la mujer. De hecho, el acusado mantiene que fue ella quien arremetió contra él. Será la juez del Juzgado de lo Penal número Uno quien dicte sentencia sobre lo ocurrido tras ver este lunes las distintas pruebas y escuchar la versión de los testigos citados en la vista oral.

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