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Sábado, 4 de mayo 2019, 22:43
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Sigue la oleada de robos en garajes de Salamanca con el mismo modus operandi: fracturar las ventanillas más pequeñas de los coches para acceder su interior. En esta ocasión han sido al menos 30 los vehículos afectados en garajes de las calles Imperial, Padre Cámara y uno de la calle San Quintín, junto al paseo de Canalejas. Según informan testigos presenciales, los hechos han tenido lugar de madrugada cuando se han escuchado fuertes golpes y sonidos de alarma. Las puertas de acceso a los garajes no estaban dañadas, por lo que se cree que los cacos aprovecharon que algunos de los vecinos no esperaron a que se cerraran y se colaron al descuido. Todos los vehículos afectados tienen fracturada la ventanilla triangular más pequeña. De hecho, son el tipo de coches que prefieren los ladrones, ya que pasan por alto de los que no poseen este tipo de ventana. A pesar de los daños materiales, los cacos se han llevado objetos de escaso valor que había en el interior de los vehículos.
Hasta el lugar se han desplazado en la mañana de este sábado agentes del Cuerpo Nacional de Policía en Salamanca, para recoger pruebas e investigar lo sucedido.
Se trata del mismo modus operandi del robo en media docena de vehículos de un garaje de la plaza de La Fuente hace justo una semana. En aquella ocasión también lograron acceder al subterráneo al descuido. También el pasado mes de marzo, los cacos accedieron a otro garaje de la Cuesta de San Blas donde robaron en tres vehículos de marca Mercedes usando también este mismo sistema.
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