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Domingo, 24 de marzo 2019, 22:27
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Aún conserva el precinto de la Guardia Civil. El dueño de la vivienda es Manuel Montoya, el padre de Bernardo Montoya, asesino confeso de la joven zamorana Laura Luelmo. El lugar donde se produjo el fatídico crimen se ha puesto a la venta y según destaca “El Periódico” el precio que han fijado desde la familia Montoya es de 6.000 euros.
El objetivo de la familia es deshacerse de esa vivienda marcada por el crimen que se produjo el pasado mes de diciembre, ya que era Bernardo el único de los nueve hermanos Montoya el que residía en esa localidad y ahora, según explican desde la familia, les supone seguir pagando una contribución por unos servicios de los que no disfrutan.
Una de las posibilidades que barajan los Montoya es que sea el propio ayuntamiento de El Campillo quien adquiera la vivienda: “Sabemos que muchos vecinos no quieren que ningún Montoya vuelva a pisar el pueblo. Si el ayuntamiento quiere comprar la cosa pueden hacerlo y construir algo bueno allí para el pueblo”. De todos modos, los Montoya no descartan que finalmente, si no son capaces de vender el domicilio, tengan que quedárselo y darle una nueva utilidad.
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