Multa por atentar contra un policía que los pilló pintando un escaparate en Labradores
Los acusados sacaron una navaja y amenazaron al agente: «Déjanos en paz o te matamos»
El Juzgado de lo Penal número Dos de Salamanca ha acogido este jueves la conformidad entre las partes en el procedimiento seguido contra A.I.B. y R.B.M., dos varones que atentaron contra un policía nacional que los pilló haciendo un grafiti en un escaparate en el barrio de Labradores. Conforme al acuerdo alcanzado, la pena de prisión que se les solicitaba por el delito de atentado y resistencia contra la autoridad (un año y tres meses de prisión) ha quedado en el pago de una multa de seis meses con una cuota diaria de 5 euros (900 euros) para cada uno de ellos.
Tal y como ha publicado este medio, los hechos tuvieron lugar el 30 de enero de 2022 sobre las 04:30 horas cuando los acusados estaban en la calle Rodríguez Fabrés, realizando una pintada en un escaparate, por lo que fueron recriminados por el agente, que se encontraba fuera de servicio y se dirigía a su domicilio.
Tras decirle los jóvenes que no era de su incumbencia, se identificó como agente y les instó a identificarse manifestando A.I.B. que no se lo creía al tiempo que salía corriendo hacia la calle Valencia, al tiempo que gritaba a R.B.M. que se escapara también, a lo que este hizo caso omiso y se quedó en el lugar.
Tras explicar el agente a R.B.M. que iba a dar aviso a la Policía Local para que le tomasen los datos y procedieran con la denuncia, regresó al lugar A.I.B. gritando: «Que no es policía, que está borracho, sal corriendo y no le hagas ni puto caso», acercándose hasta el agente, al que propinó un empujón y le espetó: «Déjanos en paz o te matamos».
Como quiera que el agente puso su móvil a grabar, A.I.B. se cubrió la boca con una braga y la cabeza con un gorro y sacó de su bolsillo lo que parecía ser una navaja, apartándose hacia atrás en ese momento el policía, momento en el que R.B.M. le dijo al otro: «Vamos apuñálale, apuñálale, vamos venga maricón ven». Al sentir que llegaba la Policía, ambos se marcharon al tiempo que decían: «Venga puta te apuñalamos».
El agente policial salió tras ellos, persiguiéndolos junto con compañeros de la Policía Local por las calles Rodríguez Fabrés, Gil de Ontañon y García de Quiñones, donde uno de los policías alcanzó a uno de ellos.