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Efectos incautados a los atracadores.
Los dos violentos atracadores de Carmelitas, condenados a dos años y un mes de prisión cada uno

Los dos violentos atracadores de Carmelitas, condenados a dos años y un mes de prisión cada uno

R.R.C. también ha sido condenado a seis meses por tenencia ilícita de armas. Ambos deberán pagar 6.000 euros a la víctima

Lunes, 24 de junio 2019, 13:12

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Ya hay condena para los dos violentos atracadores que el 26 de febrero de 2019 asaltaron de manera violenta un domicilio del paseo de Carmelitas. Aunque la Fiscalía solicitaba para cada uno de ellos una condena de cinco años y tres meses de prisión, finalmente las penas a cumplir serán sensiblemente menores. Las partes han llegado a un acuerdo este lunes, por el que R.R.C. acepta dos años y un mes de prisión por un delito de robo y seis meses por tenencia ilícita de armas. Por su parte, M.D., sólo es condenado a dos años y un mes de cárcel por el delito de robo. Ambos tendrán que hacer frente a una indemnización de 6.000 euros a la víctima que ya ha sido consignada en los Juzgados de Salamanca.

Después de la vista celebrada este lunes han regresado a la cárcel de Topas donde ya estaban internos.

R.R.C. y M.D. actuaron acompañados de un tercer individuo que no ha sido identificado aún. Sobre las 10.45 horas del pasado 26 de febrero y haciéndose pasar por carteros, llamaron al portero automático del edificio número 23, situado en el paseo de Carmelitas.

De esta manera, consiguieron que su moradora abriera la puerta tanto del portal como de su domicilio, tras lo que accedieron a su interior: M.D. armado con un revólver y R.R.C. con una pistola, y ambos con el rostro cubierto por unas máscaras.

Cuando la mujer los vio, comenzó a gritar, ante lo que uno de los acusados le tapó la boca y como ésta se resistió le propinó un empujón que provocó que la mujer cayera al suelo.

Los gritos de auxilio de la víctima alertaron a su hijo, que se encontraba también en el domicilio, y que al ver la situación de su madre, a quien trataban de amordazar mientras la apuntaban con la pistola, consiguió que salieran huyendo tras hacer ademán de agredirles con una muleta, si bien uno de ellos permaneció algún tiempo más apuntándole con la pistola directamente al pecho a la vez que retrocedía.

Las dos máscaras que portaban los delincuentes aparecieron después en el rellano de las escaleras y un vecino, al oír los gritos de la mujer, se asomó a la ventana y vio salir a los asaltantes que corrían por la plaza de Carmelitas hacia la Puerta de Zamora y desde allí se desviaron por Condes de Crespo Rascón, de lo que dio aviso a la Policía, que interceptó a M.D., en la calle Santa Teresa, y a R.R.C., en la calle Vázquez Coronado.

En poder de M.D. se hallaron, además del revólver, cinco cartuchos y unas gafas, unas llaves y unos guantes. Mientras tanto, en poder de R.R.C. los agentes descubrieron la pistola, un inhibidor con batería de radiofrecuencia y una mochila que contenía una radiografía, cinta americana, dos guantes antideslizantes, una gorra, unos guantes de vinilo, dos bolsas vacías, un pasamontañas y 13 bridas; y entre sus ropas llevaba asimismo un pasamontañas y otro par de guantes.

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