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Fotografía de la pasarela de Huerta Otea desde donde ‘Jesús el Gitano’ se lanzó al Tormes ARCHIVO
Cárcel para ‘Jesús el Gitano’, el malhechor que acabó en el Tormes tras una huida de película

Cárcel para ‘Jesús el Gitano’, el malhechor que acabó en el Tormes tras una huida de película

Incumplió el destierro de Salamanca, robó un coche e intentó escaparse de la Policía circulando en dirección contraria

Martes, 18 de abril 2023, 21:24

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J.R.J., el delincuente salmantino apodado como ‘Jesús el Gitano’, ha aceptado la condena solicitada tras el acuerdo alcanzado entre el fiscal y la defensa en el Juzgado de lo Penal número Dos de Salamanca. Acuerdo por el que, según ha podido saber LA GACETA, se le impone un año y tres meses de cárcel por un delito contra la seguridad vial por conducción temeraria, tres años y seis meses sin carné de conducir -además de la pérdida del mismo de manera que no podrá volver a presentarse al examen hasta pasados los tres años y seis meses-, así como el pago de dos multas: 1.080 euros por quebrantamiento de la medida judicial que le prohibía la estancia en Salamanca y provincia y 630 euros por el delito de robo de uso de vehículo -en ambos casos se le aplica una atenuante por adicción a las drogas-.

El delincuente, que en el momento de los hechos tenía prohibido estar y residir en Salamanca y su provincia por orden judicial, llegó este martes al Juzgado donde aceptó la condena procedente de la cárcel, donde permanece preventivo precisamente por otros incumplimientos relacionados con el destierro.

En su calificación, el fiscal comienza indicando que J.R.J. acumula numerosos antecedentes aunque ninguno computable a efectos de reincidencia y que en el momento de los hechos tenía la citada prohibición de entrada y residencia en toda Salamanca. Pese a ello, el 20 de octubre de 2022 estaba consumiendo cocaína con una mujer en la calle Limón (barrio de Pizarrales) y aprovechó para quitarle al descuido las llaves del vehículo.

A continuación se subió al coche y condujo por las calles de la ciudad, pese a carecer de puntos en el carné, a toda velocidad, bajo los efectos de las drogas e incumpliendo todas las normas de circulación, hasta ser sorprendido a las 13:30 horas en la calle Almendralejo (barrio de Buenos Aires) por una patrulla de la Policía Nacional que inició entonces una persecución con los sistemas acústicos y luminosos y dándole en varias ocasiones orden para que parara el vehículo.

Pese a ello, continuó la marcha, poniendo en riesgo en numerosas ocasiones al resto de usuarios de la vía y llegando incluso a conducir en dirección contraria y a cruzar una rotonda de Tejares por el centro.

Finalmente, al llegar a la pasarela peatonal de Huerta Otea, abandonó el vehículo con numerosos daños, corrió en dirección al Tormes y permaneció en el río hasta ser detenido por los agentes.

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