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La víctima del intento de violación en un hotel de Salamanca mantiene su versión

En el juicio la joven sostuvo que el acusado la tocó mientras dormía y que la arrastró por los pelos hasta el baño, de donde pudo escapar

Miércoles, 31 de octubre 2018, 20:30

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El Juzgado de lo Penal número Uno acogió este miércoles el juicio contra J.J.R.P., acusado de intentar violar a una joven en el baño de un hotel tras una alocada noche de fiesta. En la vista oral, que se celebró a puerta cerrada por petición de una de las partes, la presunta víctima mantuvo íntegramente su versión de los hechos y aseguró que el joven la tocó mientras dormía y que la arrastró por los pelos hasta el baño, de donde pudo escapar.La chica, con evidente nerviosismo según una de las personas que estaba presente en el juicio, aseguró ante la juez que el 7 de septiembre se encontraba con una amiga de fiesta cuando conocieron al acusado y a otro varón, ambos de origen sudamericano, con quienes estuvieron de copas y decidieron ir a un hotel del centro. Los cuatro siguieron bebiendo, contó, y en un momento dado la mujer mantuvo una relación consentida con el amigo del acusado y posteriormente se durmió; mientras que su amiga decidió poner punto y final en ese momento a la fiesta y marcharse a casa.Fue ya con los primeros rayos de luz cuando la víctima, según su relato, se despertó al notar que el acusado le estaba realizando tocamientos y le dijo que parase, por lo que se volvió a dormir. Sin embargo al despertarse, con la intención de irse, la mujer se dio cuenta que no tenía ni su ropa ni su teléfono móvil y fue al irle a preguntar a J.J.R.P. dónde estaba el terminal cuando este presuntamente la agarró del pelo, la tiró al suelo y la arrastró hasta el baño. Todo ello, apunta la joven, mientras le decía que no gritara que iba a ser peor. Por suerte la chica, desnuda, logró huir y pedir ayuda a una empleada del hotel quien, junto con el recepcionista, auxilió a la víctima y entró en la habitación para buscar y coger su ropa. Luego, llamaron a la Policía.Una versión muy diferente a la que facilitó el acusado, que dijo que estaba dormido en la cama de al lado cuando de repente la mujer le despertó muy agresiva preguntando dónde estaba su teléfono móvil y él únicamente la sujetó por los brazos. Ante la inexistencia de testigos, ya que el otro amigo de origen sudamericano declaró que él se fue a dormir y no oyó nada, el médico forense acreditó que después de producirse los hechos la víctima presentaba unos hematomas que podrían corresponderse con la presunta agresión. A este informe, el abogado de la defensa, que solicita la absolución de su cliente, argumentó que las contusiones se las podía haber generado en la relación sexual mantenida con consentimiento minutos antes. Por su parte, la amiga de la chica contó que cuando ella se fue de la habitación del hotel tuvo dificultades para marcharse porque el acusado se le cruzó en la puerta impidiéndole el paso, algo que finalmente consiguió. El juicio quedó visto para sentencia.

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