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¿Es mejor el agua del grifo o el agua embotellada?

¿Es mejor el agua del grifo o el agua embotellada?

Cuál de las dos es más sana, es la pregunta que todos nos hacemos, por qué se decanta alguien por una u otra

Jueves, 29 de agosto 2019, 16:12

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España es el quinto país de la UE que más agua embotellada consume según la Federación Europea de Aguas Envasadas (EFBW), solo precedido por Italia, Alemania, Bélgica y Portugal, lo que se traduce en unos 10 millones de botellas al día y un total de 132 litros de agua mineral por persona al año.

Según un estudio realizado por la OCU en 2017, un 46% de la población española bebe agua embotellada y, por tanto, un 56% prefiere utilizar la del grifo. Si bien es cierto que esto puede variar dependiendo de la comunidad autónoma en la que nos encontremos.

Pero cuál de las dos es más sana, es la pregunta que todos nos hacemos, por qué se decanta alguien por una u otra. Los defensores del agua del grifo hablan de la sostenibilidad y el ahorro y los amantes del agua embotellada la defienden por ser más sana.

Lo cierto es que ambas son igual de sanas. Según el Ministerio de Sanidad, el 99,5% del agua de las tuberías de nuestro país es apta para el consumo y, si en algún momento deja de serlo se corta rápidamente el suministro.

La OCU, Greenpeace, AEOPAS y la UE recomiendan el consumo de agua del grifo frente a la embotellada. El agua del grifo es mucho más económica, unas 150 veces más barata, y no contamina. Sin embargo, para fabricar un litro de agua embotellada se necesita 300 veces más energía que para un litro de agua del grifo, además, para embotellarla se consume combustible que emite gases contaminantes en su transporte, por no hablar de la cantidad de plástico que se utiliza y que origina grandes sumas de residuos.

El sabor es uno de los mayores alicientes por los que la gente se decanta por el agua del grifo, sin embargo, en catas a ciegas se ha demostrado que la mayoría no sabrían diferenciarlas. El principal problema en cuanto al sabor se encuentra en el origen del agua, dependiendo de la comunidad en la que nos encontremos y si las aguas son más duras, será más fuerte, pero eso no quiere decir que sea menos saludable.

Por lo tanto, lo más aconsejable y responsable sería el consumo de agua del grifo que resulta exactamente igual de sana que la embotellada, es más barata, más ecológica y, además, es un bien que nos resulta prácticamente gratuito cuando en otros países ni siquiera existe la posibilidad de abrir un grifo y que salga agua.

Un 56% de la población española prefiere utilizar la del grifo | E.P.

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