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Martes, 8 de septiembre 2020, 14:44
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La celebración de la Virgen de la Vega en Salamanca está siendo la más triste que se recuerda. Por todo. Desde la suspensión de las Ferias y Fiestas hasta el ambiente desangelado y gélido en lo poco que ha sobrevivido a la guadaña de la pandemia, que han sido la eucaristía en su honor y la exposición pública de la réplica de la patrona de la capital en la Puerta del Nacimiento de la Catedral.
Pese al aforo limitadísimo de 25 personas por cada una de las tres misas que se van a celebrar este martes en la Seo, decenas de salmantinos intentaron lograr asiento para poder cumplir con el precepto y la tradición; así, varias de las personas que hicieron cola para acudir a misa se tuvieron que dar media vuelta o, como mucho, conformarse con depositar un ramo de flores a los pies de la replica de la patrona a la Puerta del Nacimiento, lugar al que han acudido tres salmantinos (dos mujeres y un hombre) vestidos de charro para cumplir con la tradición pese a todo.
"Las iglesias vacías o casi vaciadas en razón de la oportuna seguridad sanitaria no deben convertirse en un símbolo externo del creciente vacío interior de la fe viva en la sociedad salmantina y en nuestra comunidad diocesana", ha sido el mensaje lanzado por el obispo, Carlos López, en su homilía en el día de la patrona.
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