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Lunes, 12 de abril 2021, 11:12
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Salamanca ha dado un impulso más en su afán por convertirse en una ciudad pionera en la lucha contra la siniestralidad de tráfico y, al mismo tiempo, ser respetuosa con el medio ambiente. Por ello, acaba de concluir el ambicioso plan de tráfico para convertir 214 calles de la ciudad, de doce barrios diferentes, en zonas residenciales, lo que implicará dar prioridad a los peatones frente a los vehículos, reduciendo la velocidad máxima a 20km/h.
Los trabajos comenzaron en el mes de diciembre en los barrios de San José (14), La Vega (15), Ciudad Jardín (4), El Carmen (12), El Rollo (17) y Puente Ladrillo (16) y posteriormente se extendió a otras zonas de la ciudad. Ya en enero arrancaron las labores de señalización en los barrios de Pizarrales (35 calles); Barrio Blanco (24); Crespo Rascón (20), barrio del Oeste (20); Garrido Norte (18) y San Vicente (14). De hecho, ha sido la zona de Crespo Rascón la última en señalizarse, en concreto en la calle Íscar Peyra.
Durante estos meses en los que se han llevado a cabo los trabajo de señalización, agentes de la Policía Local han acudido a estas vías para hacer una labor pedagógica y de información para explicar la intención de este programa, que busca “mejorar la seguridad vial reduciendo el número de accidentes y seguir construyendo una ciudad amiga para el peatón”, tal y como afirmó el alcalde, Carlos García Carbayo, en la presentación de este proyecto. Estas medidas han servido de anticipo al Real Decreto que entrará en vigor el próximo 11 de mayo en toda España que modifica el reglamento de circulación y que fija las vías urbanas en tres límites de velocidad: 20, 30 y 50.
Para llevar a cabo esta actuación, el área de Seguridad Ciudadana, Tráfico y Transportes que coordina el concejal Fernando Carabias se ha basado en un informe elaborado por la Policía Local, después de varios meses de estudio, en el que se ha analizado el volumen de tráfico, la velocidad en esas zonas así como la presencia de peatones en las calles. Con el fin de evitar la siniestralidad en estas vías, se recomendaba la reducción a 20km/h, medida que ha llevado a cabo el Ayuntamiento en unos meses.
La principal novedad, al margen de la reducción de la velocidad a 20km/h, es que los conductores deben conceder prioridad a los peatones, que pueden utilizar toda la zona de circulación, aunque, eso sí, no deben estorbar inútilmente a los conductores de vehículos.
¿Qué supone ser zona residencial? La principal novedad, al margen de la reducción de la velocidad a 20km/h, es que los conductores deben conceder prioridad a los peatones, que pueden utilizar toda la zona de circulación, aunque, eso sí, no deben estorbar inútilmente a los conductores de vehículos. Los vehículos no pueden estacionarse más que en los lugares designados para ello, mientras que los juegos y deportes están autorizados en estas zonas residenciales.
El Ayuntamiento de Salamanca no se detendrá en la implantación de estas zonas en la capital, puesto que el área de Tráfico prevé llevar a cabo una ampliación en los próximos meses a otras áreas, siempre en función de las necesidades del tráfico.
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