Salamanca, en el vagón de cola de la Región en vacunación ante la gripe

La Consejería de Sanidad ha publicado un detallado informe sobre quiénes se vacunan contra la gripe dentro de la Comunidad. Según los datos anunciados esta semana, la provincia de Salamanca no está del todo concienciada sobre la importancia de que la población de riesgo y el personal sanitario se inmunice.

Sacyl recomienda la vacunación para todas las personas mayores de 60 años. Existe una primera franja entre 60 y 65 años que recibe la vacuna tetravalente. En este tramo Salamanca tiene uno de los peores números de la Región (25,80% de vacunación), sólo superiores a los de León. De los 65 en adelante, los ‘ancianos’ salmantinos están entre los menos concienciados de Castilla y León, junto a los de León y Valladolid.

Otra de las estadísticas negativas son las referentes a lo que sucede en la residencias geriátricas. Aquí, directamente, Salamanca ocupa el último puesto. La cobertura de vacunación de los ancianos residentes en estos centros es del 85,92%, cuando la media de la Comunidad está por encima del 90%. También ‘cojean’ las cifras de cobertura de los profesionales sanitarios que trabajan dentro de esas residencias. Aún a sabiendas de que tratan diariamente con pacientes cuya salud es delicada -y a los que podrían llegar a contagiar-, solo el 24,13% de los sanitarios se vacunan.

El vagón de cola se prolonga en el capítulo de mujeres embarazadas. Forman parte de la población a la que va dirigida la campaña de vacunación recomendada, pero la cobertura del pasado año apenas alcanzó el 35%, cuando la mayoría de provincias de la Región -salvo Zamora y León- superaron con creces el 40% de media.

Dentro de las distintas categorías sanitarias, la que parece tener más conciencia de la importancia de vacunarse es la de los médicos. Al menos en Salamanca, el 47% de los profesionales de Atención Primaria y el 46% de los del Hospital sí se vacunaron el pasado año. Sigue llamando la atención que menos de la mitad de los médicos ‘obedezcan’ la recomendación -casi orden- de Sacyl de inmunizarse. Su vacunación es estratégica porque son quienes luego tratan con pacientes inmunodeprimidos o crónicos a los que podrían transmitir el virus. Además, si los médicos enferman podrían verse incapacitados para acudir a trabajar durante unos días, y se trata de una baja que podría haber sido perfectamente evitable.

El director médico de Atención Primaria, José Martín Ruano, explica que la Gerencia acostumbra a reunirse con los coordinadores de centros de salud. “Allí se les dice que, dentro de sus estructuras, deben transmitir a los trabajadores la importancia de vacunarse. En el Hospital también se hace campaña, se favorece la accesibilidad para vacunarse... Las cifras de cobertura están cerca de los objetivos de la Consejería, pero es cierto que deberían ser más aún”, expresa.

Llama la atención que MIR, FIR, QUIR y EIR que el pasado año trabajaban en centros de salud salmantinos pasaron de la campaña de vacunación. Solo un 13% recibió una dosis. Los internos del Hospital de Salamanca se movieron en la misma línea que los adjuntos: un 42,15%.