«No podemos competir con estados productores que no tienen nuestras mismas políticas»

¿Cuál es la situación del sector agroganadero actualmente?

—Es un momento de mucha actividad dentro de la agricultura. Es el inicio de la sementera y se presenta bien, aunque hay mucha incertidumbre por los bajos precios del cereal y los altos costes de insumos. En cuanto a la ganadería se refiere, también estamos en un buen momento, ya que tenemos buenos precios de la carne, pero también, con incertidumbre ante todos los problemas de sanidad animal, lengua azul, EHE etc.

En cuanto a la nueva PAC, ¿cómo está afectando a la ganadería?

—En este aspecto, en ASAJA, también estamos a expensas de saber qué pasa. La PAC 2021-2027 aún está con constantes cambios que no sabemos si se van a llevar a cabo. El año pasado hubo varias reformas que se efectuaron a lo largo del periodo de tramitación y este año volvemos a lo mismo. Para la ganadería, hay mucha inquietud de cómo tramitarlo, sobre todo con las prácticas medioambientalistas, ecorregimenes y excesiva burocracia.

Respecto a la sanidad animal, ¿qué es lo que más os preocupa a los ganaderos a día de hoy?

—El principal problema que estamos teniendo es la emergencia de los nuevos serotipos de lengua azul y de la Enfermedad Hemorrágica Epizoótica. La vacunación del serotipo 4 de la lengua azul ya estaba siendo obligatorio prácticamente en todo el territorio nacional, y buena parte de Salamanca, ya está afectada por el serotipo 1 y recientemente el serotipo 3 y, además, con la mirada puesta en el serotipo 8 que probablemente también llegue a la provincia. Por lo tanto, la sanidad es muy importante y hay que tener en cuenta la gran complejidad que tenemos para vacunar a todo el rebaño en la ganadería extensiva.

¿Estáis sufriendo muchas consecuencias desencadenadas de la Enfermedad Hemorrágica Epizoótica?

—Sí. Hay muchos animales afectados de la campaña pasada y las consecuencias que estamos sufriendo son graves. Animales que tienen que ser sacrificados por secuelas de la enfermedad, otros nacen con malformaciones, muertes prematuras etc. a lo que se le suma la complejidad de la vacunación para esta enfermedad y, aunque aparentemente la cabaña está inmunizada al haber sufrido la enfermedad, debemos estar preparados para revacunar de cara a próximas temporadas.

¿Cuáles están siendo los problemas actuales en la agricultura?

—Como ya he comentado anteriormente son los precios. No encontramos un buen momento para vender el producto porque muchos agricultores lo almacenan y lo venden en diferentes momentos y no hay un precio que compensen los costes de producción. Además, la campaña de la sementera se está viendo amenazada por las fuertes e irregulares lluvias. En muchos sitios no se puede sembrar, en otros no ha permitido recoger el girasol y la campaña de la patata también se ha visto afectada y no se ha llegado a sacar en su totalidad debido a estas abundantes precipitaciones.

De cara al futuro... ¿qué crees que habría que mejorar para fomentar el sector en España?

—Lo principal y más urgente ahora mismo sería cambiar la Ley de la Cadena Alimentaria. Estamos en un momento que estamos trabajando a pérdidas y creo que habría que tener una política agraria que fuera fiable y a largo plazo. Si la PAC aporta un 25 ó 30% de la renta agraria a día de hoy, no podemos estar a expensas de ese margen sin saber qué reforma vamos a tener dentro de un año o qué cultivos debemos a sembrar. Hay que analizar bien los sectores que tenemos y analizar las deficiencias de cada uno de ellos. Tenemos unas prácticas muy estrictas y no podemos competir con otros estados productores que no tienen nuestras mismas políticas.