Nuevo 'tetris' judicial: al menos siete tribunales de Salamanca cambian de sede
Los dos contenciosos administrativos se trasladarán, junto a la Audiencia y Vigilancia Penitenciaria, al edificio anexo al Palacio de Justicia de Gran Vía y las tres salas de lo Social se reagruparán en el antiguo MOPU de Torres Villarroel
Ni dos años han pasado todavía del «baile» de juzgados que se inició a finales de 2023 para generar un espacio en el que poder ubicar la nueva sala de lo Social, y la Justicia salmantina se prepara ya para un nuevo «tetris» que obligará a cambiar de edificio, al menos, a siete tribunales con sede en la capital. Ante el inminente inicio de las obras de rehabilitación del viejo Palacio de Justicia, cuya adjudicación se encuentra muy próxima una vez seleccionada por los técnicos la oferta ganadora, el Ministerio está planificando una serie de traslados para que las instalaciones de Gran Vía 33-37 permanezcan vacías durante su remodelación.
Los cambios de sede no afectarán solo a la Audiencia Provincial, que se trasladará al edificio anexo al Palacio de Justicia, situado en el número 39-41 de Gran Vía. Al mismo inmueble se irá también el Juzgado de Vigilancia Penitenciaria, así como los dos contenciosos-administrativos, que actualmente se encuentran en el antiguo MOPU, en el paseo de Torres Villarroel. A estas instalaciones, donde quedarían oficinas vacías, se llevarán las tres salas de lo Social, dos de las cuales se encuentran en la plaza de Colón y una tercera en Gran Vía. Aunque en los últimos meses el departamento de dirige Félix Bolaños ha buscado un local vacío en el centro de la ciudad donde poder ubicar la jurisdicción Social, ninguna de las opciones que barajaba se ha materializado. Por otra parte, el juzgado de Primera Instancia número 9 se trasladará a Colón.
Estos son los cambios que, según confirman distintas fuentes judiciales, la Gerencia Territorial de Justicia tiene previsto acometer, según trasladó a diferentes representantes de los órganos judiciales de Salamanca y también del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León en dos reuniones celebradas la pasada semana. La intención inicial era que todos estos cambios de ubicación se realicen en las primeras semanas de noviembre, pero lo cierto es que, de momento, no se ha producido ninguna comunicación oficial ni a los trabajadores afectados ni tampoco a sus representantes sindicales, por lo que fuentes judiciales apuntan que esta mudanza podría retrasarse más de lo previsto. Consultado por esta planificación, el Ministerio, de momento, no se pronuncia ni fija un calendario.
Hay que recordar que los dos juzgados contenciosos administrativos fueron trasladados de la plaza de Colón a Torres Villarroel en noviembre de 2023, y ahora se mudarán de nuevo, esta vez a Gran Vía. Conforme a este plan, en menos de dos años desde su creación, el Juzgado de lo Social número 3 se vivirá en pocas semanas su tercera mudanza. Echó a andar en las oficinas del antiguo MOPU. Cuatro meses después, Justicia rectificó y lo traslada al edificio de la Audiencia Provincia, y antes de que acabe este año volverá a las dependencias del paseo de Torres Villarroel.
Pese a todo, no parece que esta vaya a ser la última reorganización que vivan los juzgados de la capital del Tormes en lo que queda del año. Hay que tener en cuenta que el próximo 1 de enero debe entrar en funcionamiento en Salamanca la nueva reordenación del sistema judicial que establece la Ley Orgánica 1/2025, de 2 de enero, de medidas en materia de eficiencia del Servicio Público de Justicia. Según apuntan los sindicatos, la creación del nuevo Tribunal de Instancia implicará una reubicación de los puestos de trabajo de funcionarios, jueces y secretarios, con lo que muchos tendrán que mudarse de nuevo. Será así porque desaparecen los órganos judiciales unipersonales, tal y como se conocen hasta ahora. En vez de que cada juzgado cuente con unos funcionarios asignados, ahora todos los tramitadores, gestores procesales y auxiliares asistirán al conjunto de jueces y magistrados.
En cualquier caso, las dependencias que ocuparán este año los siete tribunales que se prevé trasladar serán una ubicación provisional para, al menos, los próximos tres años. Conforme al pliego de condiciones de la obra de rehabilitación del Palacio de Justicia de Gran Vía, los trabajos se prolongarán, como mínimo, hasta finales de 2028. Una vez concluidos, la Audiencia Provincial podrá regresar al edificio remodelado, y habrá que recolocar el resto de salas del edificio anexo.
Las claves
El constante «baile» de juzgados que Salamanca vive desde el otoño de 2023 responde principalmente a los graves problemas de falta de espacio que tiene el Ministerio de Justicia en sus instalaciones de la capital del Tormes. Un problema que arrastra desde hace casi dos décadas. La reforma del Palacio de Justicia tenía como objetivo precisamente ganar espacio, pero las obras se han retrasado casi dos décadas y las necesidades de espacio se han multiplicado en este tiempo.
La antigua sede de la Cámara Agraria, en Canalejas; el edificio de la Tesorería General de la Seguridad Social, en esa misma avenida; la antigua sede de la Delegación Territorial de la Junta; un local de 555 metros cuadrados en la plaza de Colón, o el inmueble de Ara, en Pozo Amarillo. Son algunos de los locales que Justicia ha barajado para trasladar a ellos varios juzgados —principalmente las salas de lo Social— y descongestionar así Colón, pero sus altas exigencias han hecho que no se haya llegado a un acuerdo en ninguno de esos casos.
Aunque los traslados de órganos judiciales que se van a hacer en las próximas semanas serán suficientes para permitir el inicio de la reforma de la Audiencia Provincial, son tan solo un «parche». La implantación del Tribunal de Instancia desde enero de 2026 obligará a realizar nuevos cambios. Y, en cualquier caso, dentro de tres años, una vez que acaben las obras, será necesario volver a reorganizar.