Las terrazas de la Plaza Mayor podrán contar con paravientos

Además, se podrán colocar en las zonas de terraza de la Plaza Mayor, salvo junto a los arcos del monumento, puesto que en este caso sí se estima una incidencia en el BIC. Además, en cuanto a la disposición de las mesas y las sillas, estas se ajustarán a los protocolos existentes, en función de la normativa sanitaria impuesta por la Junta de Castilla y León.

En todo caso, la autorización desde el área de Patrimonio de la Junta será de forma temporal, mientras dure la pandemia y, de momento, por un periodo de seis meses. Es decir, el permiso para colocar los paravientos en el ágora se trasladará hasta finales de septiembre. Posteriormente, la Asociación de Empresarios de Hostelería debería solicitar de nuevo el permiso ante la Comisión Territorial de Patrimonio Cultural, que deberá revisar la autorización.

La comisión, como era de esperar, ha dado el visto bueno a la autorización previa de la Ponencia Técnica de Patrimonio, que se trasladará ahora a los hosteleros para que puedan instalar ya los paravientos, sin que tengan que esperar más tiempo.

De esta forma, la Plaza Mayor de Salamanca se suma a la autorización recibida ya en octubre por el resto de la zona patrimonial, así como en el área fuera considerada Patrimonio de la Humanidad, que recibió el visto bueno del Ayuntamiento. Así, en octubre solicitó a la Comisión Territorial de Patrimonio que en el centro se pudieran adaptar o sustituir los paravientos que había en torno a las mesas, con una altura de 1,42 metros, para que con el cristal regulable se llegue hasta 1,7 metros. El Ayuntamiento de Salamanca ya incluyó en su informe que se trataba de medidas de “carácter temporal y transitorio debido a las circunstancias económicas y sanitarias derivadas de la pandemia” y que, por tanto, “una vez superada esta situación se deberá volver a revisar” su autorización.

Con esta medida, los hosteleros de la Plaza Mayor podrán aprovechar mejor las terrazas de las que disponen en el ágora y, sobre todo, teniendo en cuenta las próximas fechas de Semana Santa cuando, en teoría, se prevé un ligero incremento del turismo, siempre y cuando se mantenga la posibilidad de que se pueda viajar entre las provincias de Castilla y León.