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Lunes, 25 de octubre 2021, 21:10
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La Hermandad de Donantes de Sangre de Salamanca celebró el pasado sábado su 58º asamblea general extraordinaria con el acto de entrega de las medallas de la agrupación y el nombramiento como socios de honor a la Universidad de Salamanca, a la Diputación y al Ayuntamiento de la ciudad.
Un acto que comenzó con un minuto de silencio en recuerdo de los donantes fallecidos el año pasado y que continuó con loas a la solidaridad. Por otro lado, el presidente de la Hermandad, Fernando Barbero, agradeció la entrega e “implicación total” de las instituciones con la asociación, un apoyo que le permitió continuar su labor durante la pandemia a pesar de las dificultades.
El Ayuntamiento les cedió un espacio para donar en la Casa de las Asociaciones cuando se cerró el centro en el Hospital. La Universidad se volcó con ellos tanto para facilitar las expediciones como para donar en el caso de la comunidad universitaria. La Diputación, además de mantener los convenios de colaboración, impulsó su actividad en los pueblos.
El rector, Ricardo Rivero, recogió la distinción en nombre del Estudio que dirige. Para celebrarlo, confesó que pasó por la mañana al Virgen de la Vega. “Allí he puesto mi brazo derecho a disposición de los sanitarios para cumplir con mi obligación de cada trimestre”, describió su acto de donación. Como recuerdo especial comentó junto al personal el día que el autobús acudió al Campus y los alumnos esperaron para hacer su aportación hasta 50 minutos bajo la lluvia, “mojándose con la Hermandad en el más amplio sentido”, advirtió.
La diputada delegada de Servicios Sociales, Eva Picado, recogió el diploma en nombre del presidente de La Salina, Javier Iglesias, al que disculpó su ausencia “por encontrarse fuera de Salamanca”. Destacó el ejemplo que ha supuesto la Hermandad durante la pandemia “manteniendo el banco y las donaciones”, además de “la gratitud de los donantes salmantinos que responden cuando se producen los llamamientos en sus pueblos”. Aseguró a los responsables de la agrupación: “en esta misión os seguiremos acompañando”.
El alcalde, Carlos García Carbayo, recibió como “un grandísimo” honor la medalla. Describió la actividad de la Hermandad como “el mayor ejercicio en entrega” y mostró la “enorme gratitud” que profesa la ciudad a la agrupación “por sus actos tan generosos”. El acto concluyó con las entrega de distinciones a los donantes y con un vino español.
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