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De izquierda a derecha: Julia Ferreira, Manuel Martín y Elsa Castaño.
La experiencia de los enfermeros salmantinos que se han marchado al extranjero: “Quiero volver pero no con contratos de meses”

La experiencia de los enfermeros salmantinos que se han marchado al extranjero: “Quiero volver pero no con contratos de meses”

Tres profesionales describen su experiencia al marcharse a Reino Unido para trabajar

Martes, 8 de diciembre 2020, 22:11

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Julia Ferreira González. Enfermera que regresó de Reino Unido: “Volví por el Brexit y por malestar personal”

Julia Ferreira González regresó a España en plena pandemia. Sabía que necesitaban profesionales y que si volvía tendría trabajo. “Decidí volver impulsada por el Brexit y por un momento de malestar personal. Soy una persona impulsiva y con el tema del coronavirus también me sentía apartada de mi familia, así que regresé”, explica.

Llegó el 6 de abril a Salamanca después de cuatro años trabajando como enfermera de UCI en el King’s College de Londres, uno de los grandes centros de Traumatología del país, al día siguiente avisó de que estaba disponible y el día 8 ya estaba trabajando, aunque nada parecido a su experiencia en Reino Unido. “Me hicieron un contrato de tres meses y luego me lo renovaron hasta el 31 de octubre y ahora hasta el 30 de abril”, indica molesta por la inestabilidad que suponen esos contratos. “Me dan ganas de volver a Londres”, reconoce y lamenta lo mal pagada que está la enfermería en España, y más concretamente en Castilla y León, con unos 1.500 euros que están muy lejos de los 2.200 que, como poco, cobraba en Londres.

Esta es la segunda vez que regresa a España y las condiciones no han mejorado. Julia Ferreira tuvo una primera estancia de un año en el país británico. Cuando volvió se encontró con contratos de meses, semanas e incluso días sueltos. Así que se marchó de nuevo dos años después con un contrato fijo al King’s College.

Aunque Julia Ferreira está contenta de poder estar de nuevo en casa, lamenta que en España no se cuide más a los profesionales: “Salimos bastante mejor preparados que los estudiantes de Reino Unido, pero aquí sales y no hay promoción de la enfermería, mientras que en Inglaterra se crece mucho como profesional, se promueve que avances en tu carrera, sin presionarte, te facilitan que hagas cursos y vayas añadiendo currículo para promocionar y subir de escalafón”.

En Reino Unido trabaja en una UCI y al llegar a Salamanca está en la del Hospital Clínico. También la gestión de la pandemia a nivel hospitalario es muy diferente. “La organización allí me parece que ha sido mejor que aquí. Para empezar los grupos de UCI, aquí sin haber pisado UCI se ha metido a gente y se les ha dado hasta cuatro pacientes o más. Allí la ratio se intenta que sea uno a uno y si son dos con mucha disculpa. Organizan mejor y acorde a los conocimientos y si no los tienen, ponen a tu disposición formación”, comenta Julia Ferreira.

Manuel Martín. Terapeuta Ocupacional en Londres: “Quiero volver, pero no con contratos de meses”

Manuel Martín del Cañizo trabaja como terapeuta ocupacional en Reino Unido. Lleva cinco años en el país británico y, aunque reconoce que le gustaría volver a asentarse en España, ahora mismo no se lo plantea porque las condiciones laborales actuales no le convencen. “Dudo mucho que ahora mismo un médico se vuelva a España con la situación tan precaria que hay. Sé de enfermeros que han regresado, pero yo no me lo planteo. Regresar con unas condiciones en las que no tenga un contrato fijo ni un salario mensual regular y depender de hacer un montón de papeleos para tener una plaza, eso no es calidad de vida”, comenta Manuel Martín.

Ya sea con o sin plan de retorno este joven no piensa regresar en los próximos años. Hace 5 que decidió dar el salto y marcharse a Reino Unido. Buscó trabajo en España, pero solo consiguió contratos de dos semanas, 10 horas, en residencias de mayores, así que decidió marcharse en busca de un futuro mejor y de estabilidad. “Lo que pensé que era una oportunidad fue un engaño y en lugar de trabajar como terapeuta ocupacional comencé trabajando de auxiliar de enfermería”, reconoce y recuerda: “Éramos un grupo de ocho españoles y teníamos que ir por casa de los pacientes, 20-25 personas al día”. Una mala experiencia que duró poco ya que pronto encontró trabajó en una residencia de mayores y al año de llegar tuvo su primera oportunidad como terapeuta ocupacional en un hospital. En la actualidad reconoce sentirse muy contento. “Tengo muy buen trabajo, me han ascendido y soy ‘team leader’ en cuidados intensivos en el Imperial College de Londres, así que mis circunstancias profesionales han cambiado y creo que me quedan unos años hasta que vea cómo está la situación en España y decida tomar la iniciativa de abrir una clínica u otra cosa”, explica.

Aunque está feliz en Londres, Manuel Martín reconoce que le gustaría estar cerca de la familia y de los amigos, pero, insiste: “No me quiero ir con una mano delante y otra detrás, para que me hagan un contrato de dos meses y luego cambiar otra vez y estar de un sitio para otro”. En un principio iba a venir en Navidad, pero ha anulado el viaje ya que eran solo seis días y muchos gastos con dos PCR de por medio, una para entrar en España y otra en Reino Unido.

Elsa Castaño Rodríguez. Enfermera en Londres: “No me planteo regresar, Londres es como mi casa”

Un año después de terminar la carrera y sin manejar el idioma inglés, Elsa Castaño Rodríguez se marchó a Reino Unido. Es enfermera, pero apenas ha ejercido en España. Forma parte de las numerosas profesionales que entre 2010 y 2013 tuvieron que marcharse fuera para trabajar porque como consecuencia de la crisis de 2008 se congelaron las nuevas contrataciones y los recién graduados no tenían hueco en la sanidad española. Bien lo sabe Elsa Castaño, que lo sufrió y fue lo que le motivó a hacer las maletas, despedirse de su familia y buscar fortuna en Reino Unido. “Al mes de acabar la carrera me llamaron para trabajar en un psiquiátrico, pero solo por un mes y, aunque yo tenía la esperanza de que me volvieran a llamar, no lo hicieron”, recuerda con pena. Tras mandar currículos por toda España sin recibir respuesta optó por completar su formación con un máster sobre cuidados oftalmológicos, pero ni por esas. “Perdí la esperanza de trabajar en España y empecé a buscar trabajo como ‘au pair’ en Reino Unido”, relata.

Así comenzó su aventura por el país británico, que continuó en una residencia hasta que finalmente, un año después de haber llegado encontró trabajo como enfermera en un hospital del día. “Aquí en Inglaterra desde que firmas el contrato ya eres fija y puedes cambiar tantas veces como quieras de puesto de trabajo”, explica como una de las ventajas del empleo en Reino Unido y añade: “También es más fácil ascender de categoría que en España”.

“No me planteo volver. Mis padres y mis abuelos lo pasan muy mal cuando voy, por ellos estaría en España, pero yo considero que Londres ya es como mi casa, aunque me da mucha nostalgia acordarme de mi país”, reconoce y recuerda que los primeros años fueron difíciles: “Tardaba meses en recuperarme cuando volvía de España, pero desde hace un par de años viajo como si lo hiciera a mi casa”. Elsa Castaño está tan adaptada a la vida en Reino Unido que pese al Brexit, y otras cuestiones relacionadas con su profesión, no piensa en regresar aunque haya un plan de retorno: “Sé que la Sanidad en España es mucho mejor que la de aquí, pero en este mes en la UCI me han enseñado el trabajo con todo detalle, hasta que no estaban seguros de que sabía hacerlo, no me han dejado sola”, destaca.

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