La crisis castiga más a las mujeres en Salamanca: menos contratos y de peor calidad
La caída de la contratación es más intensa en ellas que en los hombres | Los empleos a tiempo parcial representan el 60,7%, más que en 2019, mientras que en los varones baja
Sábado, 22 de agosto 2020, 19:51
La pandemia ha provocado una crisis en el mercado laboral sin precedentes conocidos, al menos por la rapidez en la destrucción de empleo en tan poco tiempo. Ningún sector se libra y tampoco ningún género. Hombres y mujeres han visto como las oportunidades laborales han disminuido de manera alarmante. Sin embargo, la recesión sí está afectando en mayor medida a las mujeres, con un descenso más fuerte de la contratación y con peores condiciones, lo que agrava una brecha laboral que en Salamanca sigue siendo importante y que en los anteriores años de recuperación apenas se estrechó.
La información del Servicio Público de Empleo Estatal resulta reveladora. Hasta julio, la contratación en los hombres ha caído un 35% en comparación con el mismo periodo del año pasado. En cambio, entre las mujeres la reducción de contratos por la pandemia ha ascendido hasta el 38,2% en porcentaje. Menos opciones laborales que han lastrado a las mujeres en una época muy difícil.
No solo la posibilidad de encontrar trabajo se ha complicado para ellas. También las condiciones fijadas en los contratos empeoran. La contratación a tiempo parcial sigue siendo muy superior a la de los varones. De enero a julio, el 60,7% fijan este tipo de jornada para las mujeres, un incremento de 7 décimas respecto a 2019. El incremento es pequeño, pero llama la atención en comparación con lo que ocurre entre los hombres, donde el porcentaje de contratos a tiempo parcial ha descendido, al pasar del 38,7% del año pasado al 35,2% del actual.
El cierre de colegios en el tercer trimestre y la falta de actividades en verano han obligado a muchas mujeres a reincorporarse al mercado de trabajo renunciando a un horario completo, además de ser mayoría en trabajos donde la jornada parcial, por sus características, está muy asentada, como los servicios de limpieza o comercio. Un hecho que perjudica de manera importante a sus emolumentos a final de mes y que es la principal causa de que el salario medio anual de las salmantinas sea 3.500 euros más bajo que el de los hombres.
A estos elementos hay que añadir un tercero, la inestabilidad de los empleos para el género femenino. En lo que va de año, la firma de contratos indefinidos ha descendido un 25% en las mujeres, el doble de lo que lo ha hecho en los hombres.
