Una joya automovilística en las calles de Salamanca

Los que ya peinan canas echarán una lagrimita cuando vean por la calle esta preciosidad de Seat 850 del año de la polka. Es decir, más o menos de los años 70, que vendría a ser como el Paleolítico para la mayoría de la población. Manuel Laya captó al vuelo el paso por las calles de Salamanca de esta reliquia que luce en perfecto estado de revista, sin duda por el afán y el mimo de sus propietarios.

La parte negativa de estas piezas ya casi de museo es que lo van a tener bastante crudo para desenvolverse en este mundo plagado de Zonas de Bajas Emisiones.