Infartos fulminantes en personas jóvenes: «Si no te cuidas, aparecen los problemas»

La inesperada muerte de algunas celebridades en edades tempranas ha reavivado la interrogación sobre cómo es posible que un corazón falle a edades tan tempranas. Personas que nunca habían dado síntomas de tener problemas de corazón y, de repente, sufren un infarto fulminante que conmociona a todo su entorno: ¿qué ha podido suceder?

Aunque resulta chocante, este tipo de episodios no son tan excepcionales como se puede pensar y los especialistas explican que pueden tener dos grandes explicaciones: una lesión coronaria que se desconocía o, sencillamente, unos malos hábitos durante un tiempo prolongado. «Hay personas que tienen alteraciones congénitas que desconocen, pero lo habitual es una manifestacion más temprana de la ateroesclerosis coronaria. Son mucho menos frecuentes las anomalías coronarias, que son cardiopatías congénitas que pueden generar eventos coronarios en pacientes jovenes. En la gente joven con problemas de corazón, es más frecuente que se haya desarrollado una enfermedad coronaria precoz», explica el cardiólogo Javier Martín Moreiras.

Que un corazón 'enferme' de manera precoz es causa de malos hábitos como el consumo de alcohol, tabaco, mala alimentación, el sobrepeso... «Si no te cuidas, es cuando aparecen los problemas adquiridos. No tiene por qué ser de nacimiento», recalca.

El cardiólogo también diferencia: «No todas las muertes súbitas se deben a enfermedad coronaria (infartos). De hecho, en los pacientes jovenes, la causa más frecuentes son alteraciones que denominamos canalopatías o miocardiopatías, que inducen la aparición de arritmias».

Las recomendaciones de los especialistas en materia de prevención son sencillas. De cara a no desarrollar enfermedades, es vital seguir unos hábitos saludables de ejercicio y alimentación. Respecto a estar prevenido frente a las enfermedades con las que se puede haber nacido y se desconoce, hay unos mínimos que son el electrocardiograma y el ecocardiograma.

«Todo el mundo debería de efectuarse un electrocardiograma y, si se hace deporte, incluso un ecocardiograma. Por encima de los 40 años o, si aparecen síntomas durante la actividad o pacientes con antecedentes familiares de enfermedad coronaria en edad temprana, tambíen sería recomendable efectuar una prueba de esfuerzo. En personas jóvenes, salvo casos muy seleccionados, no indicamos las pruebas de esfuerzo», puntualiza el cardiólogo del Complejo Asistencial de Salamanca, que amplía a «personas con factores de riesgo familiares o casos especiales» el tipo de población que también debería someterse a pruebas cardiológicas más específicas.

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