Hotel Crisol Regio: tradición y modernidad al servicio de cada evento

El Hotel Crisol Regio es un referente en el sector hotelero y en la organización de eventos. Cuenta con una trayectoria marcada por la búsqueda constante de la excelencia, combina el encanto de lo clásico con la funcionalidad de lo moderno, y ofrece una experiencia única en alojamiento y celebraciones.

Destaca su amplia oferta de servicios, el trato cercano y la constante renovación. El hotel ha sabido mantener su esencia a lo largo del tiempo, pero adaptándose con agilidad a las nuevas demandas del mercado. «Nuestro objetivo es seguir apostando por los eventos tradicionales —bodas, comuniones, bautizos—, pero también queremos impulsar el alojamiento y captar a grupos corporativos, de empresas y equipos deportivos», explican desde la dirección del hotel.

Una de las próximas incorporaciones será una nueva sala de reuniones de formato tipo escuela, especialmente pensada para empresas. Este espacio estará equipado para proyecciones, charlas y jornadas de formación. La idea es atraer a nuevos perfiles de clientes que buscan espacios tranquilos, bien comunicados y dotados de tecnología para el desarrollo de sus actividades profesionales.

El Hotel Crisol Regio cuenta con nueve salones de diferentes dimensiones y capacidades, lo que le permite adaptarse a cualquier tipo de evento. Con una capacidad total de hasta 800 personas, estos espacios son ideales para congresos, presentaciones, reuniones empresariales y celebraciones familiares. Todos ellos están equipados con aire acondicionado, conexión Wi-Fi, equipos audiovisuales y de proyección, escenario, paneles móviles, servicio técnico y de restauración, además de opciones como coffee break o atención personalizada según las necesidades del cliente.

Los jardines del hotel complementan la oferta de espacios disponibles. Rodeados de vegetación y bien cuidados, suponen un marco perfecto para bodas al aire libre, cócteles, recepciones y sesiones fotográficas.

Destaca especialmente el equipo humano. Profesionales con experiencia, que trabajan cada día para cuidar todos los detalles. Desde la planificación inicial de un evento hasta su ejecución, el personal del hotel se implica a fondo para que todo salga perfecto. «Sabemos que cada boda debe ser única. Por eso, escuchamos a los novios, conocemos sus gustos y diseñamos con ellos una ceremonia que se ajuste a su sueño», señalan . Las posibilidades son amplias: desde celebraciones íntimas en el jardín hasta grandes banquetes en sus salones climatizados.

Además de su oferta para eventos, el hotel dispone de un restaurante y una cafetería abiertos todos los días. En el restaurante, los clientes pueden degustar una cocina basada en productos locales de primera calidad. La carta es variada y está pensada para satisfacer todos los gustos. Además, el menú del día es una buena opción para quienes prefieren una comida rápida y equilibrada.

Una de sus fortalezas reside en adaptarse a las necesidades de sus clientes. De este modo, cada mejora en instalaciones o servicios responde a una demanda real: más comodidad, más versatilidad y una atención personalizada.