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Miércoles, 27 de noviembre 2024, 05:00
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La presentación anual de las bodegas y vinos de la Denominación de Origen Protegida Sierra de Salamanca fue todo un éxito. El evento tuvo lugar en el Casino de Salamanca y atrajo a más de 500 personas en la tarde de ayer. El lunes se colgó el cartel de «aforo completo», lo que indica cada vez mayor interés en las bodegas de la DOP Sierra de Salamanca, que se fundó en el 2010 y el año que viene celebrará su decimoquinto aniversario.
Desde el año pasado esta reunión entre amantes del vino salmantino se divide en dos partes: una primera enfocada al público profesional, más concretamente al sector HORECA y otra a partir de las 19:30, donde se unió el público final. Ambos pases pudieron disfrutar de una tarde entre vinos elaborados por un total de 17 bodegas, tres más que en el 2023. Las bodegas participantes este año fueron las de siempre, las más antiguas: Cámbrico, Rochal, Vinos la Zorra, Cuarta Generación, Don Celestino, Dominio de la Sierra y Perahigos. A estos primeros proyectos se han ido uniendo desde el año 2020 hasta el día de hoy otras muchas bodegas: El Robledo, El Abuelo Flores, Viñas Serranas, Vínculo Serrano, Vinos Rabilargo, Malahierba Vinos, Era Matea. Y a todas ellas se suman las tres últimas incorporaciones de 2024: Veuño del Pareón, Las Pamelas y Dominio de Montemayor. Todas ellas unidas por una misma ilusión: dar a conocer vinos de alta calidad de la zona de la Sierra de Francia y alrededores.
Estos vinos son elaborados principalmente con las variedades rufete en tintos y rufete serrano blanco en los blancos. Son variedades autóctonas de la zona que expresan en boca todo el trabajo que conllevan sus elaboraciones. Todo comienza en el campo, con labranzas manuales y una orografía complicada de gestionar, pero con resultados increíbles. Después de dedicar muchas horas por parte de los viticultores, los cuales muchas veces son los mismos que trabajan en la bodega, llega el momento de la vendimia. Cada vez se encuentran con vendimias más adelantadas, este año empezaron a mediados de agosto. Se recogieron más de 265.000 kilos a pesar de las dificultades climáticas de esta añada, tales como heladas en primavera y la proliferación de mildiu en algunos viñedos.
En la tarde de ayer nos pudimos encontrar todo tipo de elaboraciones: desde vinos más jóvenes sin paso por barrica hasta vinos más longevos con más de catorce meses en barricas de roble. Cada bodega expresa el terruño y la uva a su manera y, según el dicho, en la variedad está el gusto, por lo que hubo vinos para todo tipo de paladares. En definitiva, fue una velada extraordinaria y 2024 se espera que sea una añada excelente.
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