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Primer vehículo recolector eléctrico de 1974 en Barcelona.
La e-movilidad y su historia en FCC Medio Ambiente
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La e-movilidad y su historia en FCC Medio Ambiente

La electrificación de la flota de vehículos de la compañía es una vía fundamental para alcanzar el objetivo de reducir emisiones dentro de su Estrategia de Sostenibilidad 2050

Miércoles, 6 de noviembre 2024, 05:00

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Uno de los pilares identitarios de FCC Medio Ambiente es la sostenibilidad en la prestación de servicios medioambientales. La compañía se ha marcado unos ambiciosos objetivos de reducción de emisiones dentro de su Estrategia de Sostenibilidad 2050, y la electrificación de su flota de vehículos es una vía fundamental para lograr dichos objetivos. Prueba de ello son los 3.645 vehículos propulsados por energías limpias que forman parte de su flota, 1.600 de los cuales son eléctricos, incluyendo vehículos de desarrollo propio.

El camino recorrido por FCC Medio Ambiente para llegar hasta aquí ha sido largo. Para encontrar los orígenes de la movilidad eléctrica en la compañía es necesario retroceder algunas décadas. Concretamente, en este año 2024 se ha cumplido medio siglo desde la introducción en 1974 del primer vehículo recolector eléctrico en la ciudad de Barcelona. Desde aquella primera unidad, con tecnología muy básica y pesadas baterías de plomo, hasta los vehículos eléctricos de última generación, existe un gran salto tecnológico, pero el interés en la aplicación de toda esta innovación sigue siendo el mismo y no ha cambiado desde aquellos lejanos orígenes.

En la década de los 80 y principios de los 90, FCC Medio Ambiente comienza a desarrollar pequeños vehículos recolectores 100% eléctricos con baterías de plomo para el servicio de recogida de residuos de Toledo y Barcelona.

El nuevo siglo trajo una rápida evolución tecnológica en las baterías y FCC Medio Ambiente desarrolló camiones eléctricos de recolección con baterías de Níquel (Ni-MH) con una anchura especial reducida, maximizando su versatilidad. Estos vehículos, denominados KB-I y patentados por la empresa en 2009, también incorporaban tecnologías de extensión de rango para extender su autonomía y trabajaban siempre en modo 100% eléctrico durante los recorridos de recolección.

En los siguientes años las baterías de litio revolucionaron la electromovilidad, y de nuevo FCC Medio Ambiente se subió al carro de la innovación. A los camiones cisterna eléctricos desarrollados para Badajoz y Badalona en 2011, siguieron los camiones recolectores eléctricos de gran tonelaje de 3 y 4 ejes en Madrid y Barcelona. Como resultado de estos desarrollos, FCC Medio Ambiente registró una nueva patente en 2012.

Lejos de asentarse en una tecnología, FCC Medio Ambiente siguió innovando y en el año 2014 comenzó un proyecto mediante el que desarrolló un vehículo eléctrico recolector con tecnología de almacenamiento energético de ultracondensadores (UCAPS) en lugar de baterías. Este vehículo almacenaba energía eléctrica en las frenadas y luego la utilizaba para los arranques, permitiendo ahorros considerables de energía y emisiones contaminantes. La implantación de vehículos eléctricos en la flota de FCC Medio Ambiente siguió creciendo y en el año 2015 se produjo un gran salto adelante con la puesta en marcha de la primera flota de vehículos completamente eléctrica para el contrato de Limpieza y Mantenimiento de la red de Alcantarillado de Barcelona.

Pero sin duda, el hito que marcó un antes y un después dentro de la historia de electromovilidad en FCC Medio Ambiente fue el desarrollo, a partir del año 2014, de una plataforma vehicular eléctrica completamente nueva y específicamente diseñada para servicios urbanos, a través del proyecto VEMTESU (Desarrollo de Plataformas VEhiculares, Modulares y Autoportantes de Tracción Eléctrica de Alta Eficiencia Energética para Servicios Urbanos). El proyecto culminó exitosamente en 2018 dando como resultado el primer prototipo de vehículo pesado eléctrico diseñado desde su inicio específicamente para servicios urbanos.

Además de ser un vehículo pesado de accionamiento 100% eléctrico en todas las fases de trabajo y desplazamiento, goza de una gran versatilidad y de polivalencia para todo tipo de servicios urbanos. La ergonomía fue otro factor clave en la fase de diseño, ya que incorpora una nueva cabina baja y adelantada con un único escalón de acceso a 370 milímetros del suelo, única en el mercado.

Esta plataforma de e-movilidad ha recibido numerosos premios, entre los que se pueden destacar: el premio «Most Innovative Idea Award» en la Smart City Expo World Congress 2019 de Barcelona y el Premio Europeo de Medio Ambiente a la Empresa (Premios EBAE) en la categoría Producto y/o servicio en la edición 2019/2020.

El último proyecto de movilidad sostenible desarrollado por FCC Medio Ambiente es el H2TRUCK, un chasis plataforma 100% eléctrico para vehículos pesados de servicios urbanos con pila de combustible de hidrógeno cuya primera aplicación es ya una realidad sobre un camión recolector de carga lateral de 21 m3 de capacidad. Desde hace unas semanas en fase de pruebas por distintas ciudades españolas, será presentado el próximo 6 de noviembre en el Smart City Expo World Congress de Barcelona.

En el servicio de Recogida y Limpieza que FCCMA gestiona para el Ayuntamiento de Salamanca, se renovó completamente la flota de vehículos con la tecnología de gas y electricidad más moderna y sostenible del mercado. Para tener una perspectiva precisa del alcance de la inversión, es importante destacar que el 93 % de los vehículos adquiridos presentan la etiqueta 0 o ECO.

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