

Secciones
Destacamos
Jueves, 17 de junio 2021
El pasado miercoles se conmemoraba el Día Internacional del Biotecnología, es decir, el conjunto de disciplinas para el uso de componentes de organismos vivos como genes, enzimas y células, con el fin de obtener productos con objetivos específicos. “Se trata de utilizar seres vivos o sus derivados con el fin de obtener productos o servicios beneficiosos al ser humano”, explican Iván Martín y Helena Villanueva, antiguos estudiantes del grado en Biotecnología e impulsores de la iniciativa con la que hoy recordamos esta fecha. Son ya más de medio millar los universitarios que, como ellos, han cursado en la Universidad de Salamanca estos estudios, unos de los más demandados y con más futuro.
El 16 de junio de 1980 la ingeniero genético Ananda Mohan Chakrabarty desarrolló una bacteria proveniente del género ‘Pseudomonas’, cuya utilidad radica en descomponer el petróleo crudo para el tratamiento de los derrames de petróleo. Este descubrimiento científico marca el inicio de la Biotecnología como ciencia.
Más de cuatro décadas de aportaciones al campo de la medicina, el medio ambiente, los procesos industriales, la recuperación de ecosistemas naturales, la bioinformática, los cultivos sostenibles y otros muchos ámbitos reflejan la importancia de esta ciencia muy vinculada al desarrollo sostenible.
En la pandemia de coronavirus, la Biotecnología también ha jugado un papel esencial con el desciframiento del genoma del virus SARS-CoV-2, pero, además, a nivel sanitario ha supuesto un avance muy importante para el desarrollo las terapias génicas, la hormona del crecimiento, la vacuna de la Hepatitis B y el desarrollo de la insulina, tal y como ponen de relieve los expertos en el tema. No se puede olvidar tampoco que son los institutos de biotecnología los responsables de las vacunas de la covid.
En Salamanca, Biotecnología es sinónimo de excelencia. Año tras año es la carrera que requiere la mayor nota de corte, solo superada en alguna ocasión por Medicina, con una puntuación por encima de los 13 puntos, de forma que sus estudiantes destacan por tener un alto nivel de conocimientos.
Como recuerdan la decana de la Facultad de Biología de la Universidad de Salamanca, Rosario Arévalo, y la coordinadora de los estudios, Isabel Muñoz Barroso, fue en el año 2004 cuando se estrenó la carrera de Biotecnología, cuyo plan de estudios fue recientemente modificado en 2020 para ampliar y actualizar la oferta de asignaturas optativas de forma que el estudiante pueda profundizar en áreas emergentes y competitivas de esta ciencia en constante desarrollo.
Implantados en todos los países de la Unión Europea, en España 28 universidades ofertan este grado que, pese a su elevado nivel de exigencia, cuenta con una demanda muy superior a las plazas ofertadas, 35 por curso en el caso de la Universidad de Salamanca, de forma que en estos 16 años suma ya cerca de 600 biotecnólogos formados en este ámbito de conocimiento.
“El conocimiento de la complejidad de los seres vivos en numerosas facetas permite una mayor comprensión y la mejora en los procesos de intervención humana en muchos aspectos, desde la alimentación y la salud hasta el medio ambiente. De hecho, las Biociencias Moleculares y sus aplicaciones biotecnológicas están consideradas, después de las tecnologías de la información, la siguiente gran ola de expansión de la economía basada en el conocimiento”, subrayan Arévalo y Muñoz e insisten en el potencial de la Biotecnología por su gran número de aplicaciones.
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.