Borrar
Encarna y, tras ella, el monte donde trabaja el mundo de las setas.
Una nueva vida en la España vacía cultivando setas

Una nueva vida en la España vacía cultivando setas

Encarna Redondo fue la primera emprendedora en asentarse en la provincia con el programa “Revitalizar” de Adriss. Lo hizo hace un año en Puerto de Béjar y allí sigue

TEL

Jueves, 31 de marzo 2022, 21:39

Necesitas ser registrado para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Después de estos meses viviendo en lo que algunos llaman la España vacía, puedo asegurar que por los menos esta zona no esta para nada vacía y muchos menos muerta. Si quieren, está olvidada por las administraciones, con menos recursos, con menos población, pero no vaciada. Y, personalmente, me parece una falta de respeto mencionar a las zonas rurales de esa forma”, explica Encarna Redondo, que fue la primera persona en asentarse en la zona de las sierras del sur de Salamanca, y más en concreto en Puerto de Béjar hace ahora un año. Lo hizo a través del programa “Revitalizar”, que desarrolla el grupo de acción local Adriss para ayudar a personas a asentarse en la zona.

“Aquí viven muchas familias que trabajan y se esfuerzan por salir adelante, por mantener tradiciones, por limpiar bosques y por hacer comunidad. Simplemente son la España rural y ahora lo digo con mucho orgullo y esperando recibir un trato justo como cualquier otra zona del país”, añade la emprendedora, que se asentó en una zona de gran riqueza forestal para producir setas ya que, como ella misma explica: “desde muy pequeña ya me apasionaba recolectar verduras del huerto con mi padre, que salieran patatas de la tierra era magia. Y con diez años fui por primera vez al bosque a recolectar setas silvestres y quedé enamorada, desde entonces el otoño pasó a ser mi estación favorita. Ya de mayor, un señor japonés me contó que en su país se cultivaban setas de forma natural en los troncos y la idea me quedó dando vueltas en la cabeza... En 2013 me fui a viajar y al final me quedé ocho años en Chile. En 2020 decidí regresar a España, tenía muy claro que sería en una zona rural buscando la naturaleza y calidad de vida”. Sintió que era el momento de iniciar un proyecto de unión entre gastronomía, micología y sostenibilidad y llegó a la provincia. “Tenía muy claro que cultivar setas era mi proyecto de futuro, ahora me faltaba un bosque o terreno para poder hacerlo. Y, desde hace ya muchos años, se habla en la prensa y televisión de la España vaciada, bancos de tierras y asociaciones que trabajan contra la despoblación. Durante dos meses busqué en internet, llamé por teléfono y envíe 62 correos. De todos ellos únicamente me respondieron dos y uno de ellos fue un técnico de Adriss”. Después, llegó el asentamiento, que fue finalmente Puerto de Béjar. Según explica, “tenía planeado pasar varios días conociendo la zona para después decidir que ubicación era la mejor para desarrollar el cultivo de setas. Y desde el primer momento, en Puerto de Béjar se dieron todas las condiciones y facilidades. Llegué un domingo y al martes siguiente ya tenía piso para vivir y terrero para cultivar. Llegando de la mano de Adriss y sumado a la buena disposición de los vecinos fue muy sencillo saber que aquí era el lugar correcto”.

Un año después allí sigue y está contenta: “vivir rodeada de bosques y naturaleza es realmente calidad de vida. La experiencia tanto personal como profesional es muy positiva. Por sobre de todo, destacar las buenas personas que han ido apareciendo en estos meses y su generosidad en muchos sentidos”.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios