Borrar

La Moza de Ánimas vuelve a recorrer las calles de Mogarraz

Las estrechas calles de la villa estuvieron alumbradas por la luz de las velas, pidiendo por los difuntos del Purgatorio en la “Noche de las Almas Blancas”

Lunes, 1 de noviembre 2021, 22:57

Necesitas ser registrado para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

El sobrecogedor sonido de las esquilas acompañando las plegarias por los fieles que están en el Purgatorio protagonizó este lunes de nuevo la celebración de la “Noche de las Almas Blancas” de Mogarraz, instaurada hace ahora diez años.

Celebrada durante la última década, aunque el pasado año la negativa evolución de la pandemia obligó a su suspensión, la “Noche de las Almas Blancas” volvió a congregar a cientos de personas que acompañaron a los mogarreños en su recorrido encabezado por la Moza de Ánimas, Magdalena Maíllo, que en esta ocasión estuvo amparada por Rocío Hernández, preparada para tomar el relevo ante la avanzada edad de la “moza”.

La ermita del Humilladero fue el lugar elegido para iniciar el recorrido por las estrechas y típicas calles de Mogarraz, iluminadas para la ocasión por miles de velas blancas. Delante, las dos Moza de Ánimas, junto con el investigador e historiador serrano Antonio Cea, y detrás en un silencio respetuoso, los vecinos y visitantes.

Este respetuoso silencio sólo se rompió por los toques, en grupos de tres, de la esquila que porta la protagonista de la tradición y la salmodia que en cada una de las esquinas señaladas del recorrido entona: “Fieles cristianos, acordémonos de las Benditas Almas del Purgatorio con un Padrenuestro y un Ave María por el amor de Dios... —tres nuevos toques de la esquila— Otro Padrenuestro y otra Avemaría por los que están en pecado mortal, para que su Divina Majestad los saque de tal miserable estado”.

La comitiva continuó su camino, repitiéndose el secular rito, mientras la campana de la iglesia parroquial de Nuestra Señora de las Nieves sonaba cada vez que un familiar la tocaba en recuerdo de sus difuntos. Como testigos silenciosos de esta tradición recuperada, los cientos de retratos pintados por el artista mogarreño Florencio Maíllo, que desde las fachadas de las que son o fueron sus casas, vieron pasar a la Moza de Ánimas, con gestos agradecidos de los familiares que piden por sus difuntos.

Finalizado el recorrido en la Plaza Mayor de Mogarraz, los participantes disfrutaron de un chocolate caliente ofrecido por el Ayuntamiento que preside la alcaldesa, María Soledad Álvarez Cascón.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios