La Junta redacta ya el primer paso elevado de Santa Marta y Carbajosa

La Junta de Castilla y León «ya está redactando el proyecto del paso elevado que permitirá unir los términos municipales de Santa Marta de Tormes y Carbajosa de la Sagrada», resaltó el regidor de Santa Marta de Tormes, David Mingo.

La nueva pasarela se emplazará en un punto que servirá de nexo entre las urbanizaciones más pobladas de las dos localidades. En concreto, se ha previsto que se instale en la CL-510, la carretera de Alba, en la zona de la rotonda que da acceso a Valdelagua y las urbanizaciones de Carbajosa.

Se estima que más de 4.500 personas residen en estas zonas urbanas de Santa Marta, algo a lo que hay que añadir los residentes de Carbajosa que podrían beneficiarse de esa nueva infraestructura que «redundará en la seguridad de los peatones y vecinos de ambas localidades», resaltó David Mingo, «es el punto básico en el que está justificado que se construya y no en otro».

Esta zona de Santa Marta, por ejemplo, «cuenta con farmacia, supermercado, establecimientos de hostelería y otros servicios que son los más cercanos para los vecinos de ambas zonas urbanas de las dos localidades y por tanto las que utilizan por su cercanía», indicó David Mingo.

En el mismo sentido se manifestó el alcalde de Carbajosa de la Sagrada, Pedro Samuel Martín: «Es una infraestructura que va a ser muy útil para proteger la seguridad de los peatones de ambas localidades que necesitan un punto protegido para cruzar la carretera y acceder a los servicios que hay en ambos municipios».

Cabe recordar que esta carretera es unas de las radiales más concurridas de la provincia, puesto que a diario soporta un tráfico superior a los 12.500 vehículos, entre ellos muchos pesados.

Además de la nueva pasarela peatonal, que enlazará con Carbajosa de la Sagrada, la localidad de Santa Marta de Tormes también contará con una pantalla antirruido a la altura de Valdelagua. Se estima que el proyecto pueda estar redactado a lo largo del verano de 2025, lo que supone el primer paso para la ejecución de una infraestructura que pondrá fin así a uno de los problemas de seguridad vial más preocupantes en el entorno de las urbanizaciones, protegiendo también del ruido de los miles de vehículos que pasan por allí a los vecinos en estos núcleos de población.