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La bandera ondea estoicamente frente al noble junto a la iglesia de Hinojosa de Duero.| CASAMAR

Hinojosa de Duero revive la leyenda y la historia del Baile de la Bandera

La localidad celebra con ímpetu la secular tradición puesta en escena por el abanderado y alabardero

Viernes, 25 de junio 2021, 13:11

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Orgullosos de sus costumbres, un año más los hinojoseros festejaron San Juan Bautista en una de sus jornadas más vistosas. Tras la misa en honor al patrón, los vecinos se agolparon alrededor de la iglesia parroquial para recibir al elenco encargado de seducir a toda la localidad con el Baile de la Bandera, una danza frenética y expectante en la que el abanderado vence y libera al pueblo de un taimado y opresor señor feudal.

Miguel Caballero Galante y Pedro Méndez Hernández se impregnaron en los papeles de abanderado y alabardero, respectivamente, ambos veteranos en esta mimada representación de apenas unos minutos pero gran intensidad física, al son de la gaita y el tamboril de José Manuel Bartolo Gómez. Tanto ellos como los mayordomos lucieron límpidos sus habituales camisas blancas impolutas, a juego con las cómodas zapatillas que son necesarias para tal menester.

Primero, el portador de la alabarda giró efusivamente alrededor de los mayordomos, e incluso tuvo que sortear a un espontáneo que dio emoción al baile, flexionado en el suelo durante una de las vueltas, para que el bailarín tuviera que pasar por encima de un salto.

Esta danza llega al culmen con los vítores que acompañan al abanderado durante su incansable papel, en el que la bandera es un apéndice de sí mismo.

Protagonista y antagonista fueron los únicos libres de mascarilla dada la intensidad física que requiere este baile, que combina juego de pies con resistencia al trote, y habilidades sosteniendo una hercúlea bandera en movimiento constante, a lo que se suma la velocidad in crescendo.

Ni siquiera el año pasado Hinojosa de Duero dejó hizo un parón, ya que el Baile de la Bandera fue, de hecho, el único acto que sobrevivió a la festividad de San Juan Bautista, alegrando los corazones de tantos vecinos e hijos del municipio.

Una vez más las mascarillas esculpieron el ambiente entre niños, jóvenes y mayores, aunque esta vez con más ánimo, ya que a este acto le siguió una concurrida comida popular con sabor a garbanzos con callos para 300 comensales en la Plaza de Juego Pelota, seguida de malabares circenses en el patio del colegio, y, por último, a las 22:00 horas, el concierto de “Vespas y Lambrettas” de la mano del Grupo Pikante, en el mismo espacio.

Así, la jornada se abrió con un desayuno tradicional y se cerró con música, convirtiéndose en la más completa y dinámica de todo el programa de fiestas de este año. Con ganas de fiesta, libertad absoluta y luciendo los colores de las peñas, los hinojoseros aún disfrutan de contenidos actos de ocio dentro de lo permitido hasta este sábado.

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