El ángel de la guarda más especial de este niño salmantino

En un primer momento, Alicia Abril recurrió al Consistorio local para ver si era posible la contratación de un monitor solo para estar a cargo de David, pero era imposible por su elevado coste. Entonces se puso en contacto con la Junta de Castilla y León para buscar una solución.

“Me pusieron en contacto con el Consejo de la Juventud de Castilla y León y fue cuando descubrí el servicio que ofrecen, junto a la Asociación ASPAYM, y es que cubre un asistente personal si una persona con discapacidad quiere participar en cualquier campamento”, explicó la orientadora. Por ello, David, con este servicio y con la ayuda del Ayuntamiento, ha podido participar durante todo el mes de agosto en las actividades del campamento municipal con un asistente particular.

“Esta asistencia personal es un recurso basado en la ayuda y en los apoyos personalizados e individualizados adaptados a las necesidades y peculiaridades de cada persona en diferentes situaciones y contextos en los que se encuentra”, aclaró Sandra Ámez, presidenta del Consejo de la Juventud de Castilla y León. “Un ejemplo es el de David, que para poder ir al campamento tenía unas necesidades y particularidades específicas que no tiene otra persona con otro tipo de discapacidad o el tipo de actividad es completamente distinta”.

Este servicio, de asistencia personal, se constituye como una herramienta fundamental para fomentar la independencia y la autonomía de todas las personas, situándolas en esa igualdad plena con el resto de la comunidad en acceso a oportunidades y servicios.

Para Corina, Alicia Abril se ha convertido en su ángel de la guarda en todo este tiempo que lleva con ellos. “Gracias a esta asistencia, David ha podido interactuar con otros niños de su edad y, por ello, hay que fomentar este tipo de ayudas para que ningún niño se sienta apartado de la sociedad por culpa de sus capacidades”, afirmó la orientadora. “Hay que dar más opciones de ocio a los padres para que sus hijos puedan participar en cualquier actividad y así poderse integrar, además, de mejorar su nivel cognitivo”.

La presidenta del Consejo de la Juventud de Castilla y León cree que “es imprescindible la ampliación de esta figura para poder dar servicio a todos los espacios de la Comunidad autónoma. Independientemente de la organización e institución que desarrolle la actuación para favorecer así la inclusión de todo el colectivo juvenil en todos los espacios”, apostilla.

Por ello, las instituciones deben dar visibilidad y apoyar este tipo de servicios para apoyar a las familias. Además, todo el proceso de gestión de la asistencia personal lleva una serie de pasos para garantizar la integridad y el papel activo de la persona en el centro de la elección de la figura prestadora de apoyo.

La asociación de personas con lesión medular y otras discapacidades físicas de Castilla y León trabaja junto al Consejo de la Juventud en este proyecto. Se encargan de la selección y gestión del personal, de la presentación de objetos y propuestas de mejora y la formación del personal. Para formar parte de la bolsa de empleo de asistencia personal es necesario superar una formación especial de veinte horas.

El servicio de asistente personal que ofrece el Consejo de la Juventud de Castilla y León cubre los gastos de una sola semana. Pero gracias al Ayuntamiento de Villares, David ha podido participar durante las otras tres semanas de agosto en las actividades del campamento de Aldeaseca de la Armuña, porque se ha ocupado de financiar la asistencia del monitor particular durante este tiempo.