La Diputación de Salamanca apuesta por el empleo joven y el desarrollo rural

Con el objetivo de generar actividad económica y riqueza, mantener la prestación de los servicios en el medio rural, retener el talento de personas jóvenes ofreciéndoles oportunidades y también luchar contra el reto demográfico y la despoblación, la Diputación de Salamanca desarrolla con éxito varios proyectos.

En el año 2020 se creó el primer Plan de Empleo Juvenil Universitario con el fin de incentivar la contratación de jóvenes recién titulados para, por un lado, dar la oportunidad a egresados de iniciar su vida en el mercado laboral y, por otro, ofrecer a los municipios con una población inferior a los 20.000 vecinos (excepto la capital salmantina) un importante apoyo en la gestión diaria de sus servicios.

El plan arrancó en colaboración con la Universidad de Salamanca y ya ha alcanzado la cuarta edición, sumándose en esta última también la Universidad Pontificia de Salamanca. «La idea surgió para poder retener talento a través de un contrato en prácticas en los ayuntamientos donde necesitan este apoyo de egresados, sobre todo en labores de gestión o en las secretarías», señala Antonio Labrador, diputado de Empleo y Desarrollo Rural.

El plan cuenta con un presupuesto anual de 650.000 euros para ayudar con 12.000 euros a los ayuntamientos interesados en contratar a recién titulados. Entre las titulaciones más demandadas, destacan los egresados en Derecho, ADE, Económicas, trabajadores sociales, ingenieros agrónomos y técnicos de Medio Ambiente, «aunque también interesan cada vez más perfiles relacionados con el Turismo, la Educación, o el cuidado de la tercera edad y la infancia», explica Labrador.

Los egresados reciben el salario mínimo durante los doce meses que están contratados. La Diputación, de hecho, ayuda a los ayuntamientos con 12.000 euros, a los que se suma el dinero que aportan también los consistorios. «Este importe debe ser un mínimo de cuatro mil euros, por lo que la Diputación estaría subvencionando un 75% del coste total».

La Diputación de Salamanca también apuesta por ofrecer una segunda vida a los negocios de la provincia que no tienen una opción de relevo generacional, a través del proyecto Negocio Rural, que desde su puesta en marcha ha demostrado ser una herramienta clave para combatir la despoblación y revitalizar la economía en el entorno rural.

«Se han traspasado 72 negocios en catorce meses. Muchas personas proceden del mismo municipio, pero también han venido de fuera, sobre todo de Madrid y del País Vasco e incluso de otros países como Portugal», subraya el diputado. Gracias a este proyecto, combinándolo con AFE, un programa mixto de formación y empleo de agricultura y ganadería, también se ha conseguido «que algunos jóvenes se hayan hecho cargo de explotaciones de vacuno o porcino», añade Labrador.

Por otra parte, la Diputación de Salamanca lanza cada año una nueva edición de la Estrategia de Empleo con el objetivo de seguir impulsando el tejido empresarial en la provincia. Con un presupuesto total de 4,5 millones de euros para esta nueva convocatoria, el programa se ha convertido en «un pilar fundamental para combatir la despoblación en el medio rural», tal y como ha explicado recientemente el presidente de la Diputación de Salamanca, Javier Iglesias.

La Estrategia de Empleo se estructura en torno a dos ejes principales: autoempleo, con el objetivo de retener el talento local y apoyar a los autónomos que desean emprender en la provincia; y el fomento del empleo, que facilita la contratación de trabajadores en pequeñas y medianas empresas ya asentadas en Salamanca, impulsando así el crecimiento y fortalecimiento del tejido empresarial.

De los 4,5 millones de euros de esta convocatoria, 3 millones serán para emprendedores, mientras que el 1,5 restante se destinará al fomento del empleo.

Para la línea de Autoempleo, los emprendedores podrán recibir hasta 12.000 euros en un año (7.000 euros para gastos generales y hasta 5.000 euros para TIC), lo que supone un incremento con respecto a la última convocatoria de 2.000 euros (20%).

En cuanto al apartado de Fomento del Empleo, se establece una financiación del 75% del coste del salario bruto, con un máximo de 1.040 euros al mes durante 12 meses. El contrato máximo será de 12.480 euros anuales por trabajador, con un tope por empresa de 24.960 euros.

Javier Iglesias ha resaltado la importancia de este programa, «que se ha convertido en una seña de identidad de la Diputación de Salamanca», ya que desde sus inicios se ha ayudado a 1.235 autónomos a emprender en el mundo rural, además de permitir la contratación de 395 personas en empresas de la provincia.