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S. Dorado

Ciudad Rodrigo

Viernes, 4 de octubre 2024, 21:30

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Las calles, engalanadas para la ocasión han comenzado a bullir en Ciudad Rodrigo con la llegada de la Feria Medieval «La Conjura de Ciudad Rodrigo», una cita marcada en el calendario de todo mirobrigense que cada vez convoca a más personas y abarca más actividades. El grupo Astrolabio abrió la tarde con un concierto en el patio del Palacio de los Águila, un acontecimiento en el que ya se dejaron ver muchos trajes medievales, entre ellos los de que vestían con donosura varios concejales del equipo de Gobierno del Ayuntamiento.

Al mismo tiempo fue cobrando vida en la Plaza del Castillo el mercado medieval, con puestos de artesanía, cuero, bisutería, textiles, dulces y hasta snacks naturales para perros, además de contar con el habitual tíovivo, las tabernas que hacen las delicias del público en la jornada vespertina, y la exhibición de aves rapaces, que contó además con la inteligencia de los cuervos, encargados además de abrir el espectáculo a las 19:00 horas, aunque mucho antes los más curiosos habían tenido la ocasión de hacerse fotos con lechuzas y otros bellos ejemplares. Hasta un grupo de ocas perfectamente educadas se abrieron paso entre la multitud a lo largo del mercado.

También el campamento de oficios, en la Plaza de Dámaso Ledesma, contribuyó a sumergir a los mirobrigenses y visitantes en épocas pasadas, con camastros, a la luz de la lumbre, y luciendo herramientas como cepos de castigo, además de poder ver de cerca el proceso de elaboración de lacre para sellar misivas.

Los grupos de música medieval, danzas y malabares fueron recorriendo y animando por las calles del centro, llevando la jovialidad de la música celta típica de las tabernas a cada rincón del entorno. Las actuaciones, variadas y de la mano de distintas agrupaciones, continuaron en un agradable día soleado al que siguió una apacible noche.

Ciudad Rodrigo se sumerge en un medievo en el que no hay puntada sin hilo
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