Ciudad Rodrigo arropa la candidatura a la UNESCO de las Fortificaciones de Frontera

La localidad portuguesa de Almeida acogió el acto de presentación de la candidatura a convertirse en Patrimonio Mundial de la Unesco de las Fortificaciones de Frontera. Un proyecto que, tras más de veinte años de trabajo, da pasos para crear un atractivo no solo turístico, si no también de impulso de futuro para esta zona transfronteriza.

«Es un candidatura muy ilusionante para todos y que va a poner en valor el patrimonio militar abaluartado de ambos países», declaró el alcalde de Ciudad Rodrigo, Marcos Iglesias, que estuvo presente en el acto para mostrar el apoyo de la localidad mriborigense a este proyecto. No en vano, el primer edil espera que, dentro de un corto de espacio de tiempo, Ciudad Rodrigo y otros municipios del oeste salmantino puedan unirse a la candidatura. Cabe recordar que, en la legislatura anterior, el Consistorio mirobrigense ya presentó un predossier como paso previa a su adhesión a la candidatura lusa «de la tanto esperamos», señaló Iglesias.

Los representantes de las tres localidades portuguesas de Almeida, Marvāo y Valença, que encabezan la iniciativa, explicaron que este día «llega después de más de dos décadas de duro trabajo y esfuerzos» tal y como aseguró el presidente de la Cámara municipal de Almeida, Antonio Machado.

«Estamos ante una candidatura de muchísimo peso, gracias a la unión de ciudades abaluartadas con el objetivo de representar un valor importantísimo de una frontera, La Raya, con patrimonio grandísimo, un valor excepcional y una historia fortísima», aseveró Ana Paula Amendoeira, vicepresidenta de la Comisión Nacional Portuguesa de ICOMOS, que afirma que «tenemos que demostrar a la Unesco que esto es un valor de la Humanidad como tal en la unión de todas estas ciudades abaluartadas».

Además del alcalde de Ciudad Rodrigo, estuvo presente la regidora del municipio de San Felices de Los Gallegos, María Antonia Redero, cuyo castillo podría formar parte también en el futuro de este proyecto, así como los presidentes de las cámaras municipales portuguesas implicadas.

Ahora, una vez presentada la candidatura, todas las partes implicadas mostraron su intención de aumentar la proyección de estas fortificaciones para seguir el camino que lleva al Patrimonio de la Humanidad

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