Caldereta y Melón en el penúltimo día de festejos en Valdelosa

Aunque el olor era el perfecto imán de atracción, es cierto que costaba acercarse hasta el punto en el que se había colocado la cazuela gigante para la preparación de la caldereta debido al calor que se desprendía. Y es que los valientes, especialmente los más pequeños que correteaban sin que sus padres pudiesen pararles los pies, desafiaban a las brasas con tal de ser los primeros en llevarse a la boca una porción de esa caldereta que tenía un color espectacular. Pero ante tantos días de festejos —este sábado se cierran las celebraciones por este año— los excesos no son la mejor forma de mantener los riesgos para la salud a raya, de ahí que en la penúltima jornada de fiestas el sabroso plato de carne en salsa se acompañase de una ración de melón como contrapunto a la intensidad de los sabores salados. La comida del viernes, en la que se prepararon 1.000 raciones de carne según confirmaron los cocineros, fue la última cita gastronómica de estas fiestas en honor a San Roque. Bien es cierto que muchos, movidos por el cansancio acumulado, decidieron recoger sus raciones y llevárselas a sus casas. Pero la caldereta popular no fue la única cita del día, sino que los vecinos de Valdelosa tuvieron la oportunidad de disfrutar también de los animados ritmos de la charanga "La Clave", que recorrió las calles del pueblo como la antesala al posterior almuerzo. Y para quemar todo lo ingerido a mediodía, muchos de ellos se sumaron a la Holly Fiesta Color, es decir, la perfecta simbiosis entre color y música. Además también se celebró un animado pasacalles con la actuación de "Pandero Show" junto al grupo Samba y como fin del día, para los que todavía tuvieron fuerzas, bailaron de la mano de la orquesta "Suavecito".